Las religiones en la enseñanza pública: Jesús Manuel Gallardo en el colegio salesiano de Majadahonda

MANU RAMOS. Llega la Semana Santa 2022 y la religión cobra actualidad en la prensa. Numerosos medios de comunicación y webs (Cope, Religión en Libertad, Hecho en California, etc) reproducen la entrevista con la que la Conferencia Episcopal Española ha querido poner de ejemplo este 6 de abril (2022) a Jesús Manuel Gallardo, profesor de religión desde hace 20 años en el colegio salesiano de Majadahonda. «Por mucho que la enseñanza de la religión suela ser el “blanco fácil” de las nuevas leyes educativas, como ponen de manifiesto los profesores de esta materia consultados, y de que también haya sido considerada durante mucho tiempo como una ‘maría’, lo cierto es que son una amplia mayoría los alumnos de Educación Infantil y Primaria que cursan esta materia en los centros públicos. Sin embargo, para el director de un centro escolar, José Manuel Andrés Ortega, la asignatura de religión supone un quebradero de cabeza para los colegios que tienen alumnos de distintas procedencias y religiones (en la actualidad se imparten la católica, la evangélica y la islámica), puesto que es muy complicado coordinar los horarios, teniendo en cuenta además las limitaciones de lo maestros, que en muchas ocasiones deben dar clases en varios colegios», señala el periodista Miguel Cabrera. De hecho, la Comunidad de Madrid solo dispone de tres profesores para enseñar en los colegios religión musulmana a casi 50.000 alumnos.


El profesor de religión católica de Majadahonda, Jesús Manuel Gallardo, aflora los siguientes titulares: “Ser profesor de religión implica creer en lo que decimos y en lo que hacemos”; ”Los alumnos que cursan religión se plantean lo que significa ser persona, ser cristiano”; “Esta asignatura es muy importante para la sociedad, para formar a personas con criterio”. Y es que Jesús Manuel Gallardo lleva la enseñanza de la religión en sus venas. Para él no es una asignatura más. Afirma rotundo que “es una asignatura como una catedral”, donde los alumnos no solo aprenden conocimientos sino un modo de estar en el mundo, unos valores que les servirán para estar en él. Nos cuenta que muchas veces en esta asignatura es la primera vez que los estudiantes se hacen las preguntas esenciales de la vida o incluso que oyen hablar de Dios». Gallardo se enorgullece de pertenecer a los más de 35.000 profesores de religión católica y de haberse preparado para impartir esta asignatura. En el sistema educativo español es una asignatura de oferta obligatoria en los centros educativos pero de libre elección para los alumnos. Destaca que más de 3 millones de alumnos siguen eligiendo cada curso la asignatura de religión. “No son los padres los que les apuntan cuando van siendo mayores, los propios chavales la escogen en la matrícula año tras año”, señala.

¿Por qué decidiste ser profesor de religión? –Hace ya 20 años que empecé a dar esta asignatura en el colegio salesiano de Majadahonda, en Madrid, y no me canso. La verdad es que es una asignatura que no solo llena la cabeza, sino que la forma bien y ayuda a transformar el corazón. A los alumnos les ayuda a descubrir que la vida no es mera biología o mera ciencia, sino que más allá de lo que aparece, hay algo que da sentido, algo que dota, algo que les hace preguntarse por el sentido de su vida. ¿Cómo crees que esta asignatura les influye a los niños y jóvenes que la eligen? –Los alumnos que cursan la asignatura de religión no sólo se plantean conocimientos, sino también durante el curso se hacen preguntas importantes. Se cuestionan lo que significa el ser humano, ser cristiano y en definitiva, ser una persona que vive en el siglo XXI con unos valores. Sabemos que utilizas métodos innovadores en tus clases como concursos, teatro, kahoots con la pizarra digital… ¿Todo ello con qué objetivo? –El objetivo de la asignatura al final es que cuando vean en el horario que toca religión digan: “¡toma!“ y no piensen: “¡menudo rollo!”. Yo creo que es una asignatura que no deja indiferente y si podemos hacerla cada vez más amena, tendrán mayor ilusión. Podemos trabajar toda la innovación y todos los recursos que hagan falta, hay muchas posibilidades. Hacemos todo lo que sea para que nuestros alumnos estén felices y contentos en ella.

Vemos que te sigue ilusionando enseñar a tus alumnos ¿para ti como profesor que te aporta dar esta clase después de 20 años en la docencia? –Para mí ser profesor de religión implica creer en lo que decimos y en lo que hacemos. Es algo muy importante porque transmitimos aquello que somos. Incluso también tenemos que tomar conciencia que muchas veces donde los alumnos oyen hablar de Dios, donde oyen hablar de la Biblia o de aquellos elementos que forman parte del corpus de conocimientos de la asignatura es realmente por lo que el profesor transmite. Por eso es tan importante esta asignatura para la sociedad de hoy, para formar personas con criterio. Educamos con lo que somos y enseñamos con lo que sabemos. Yo les digo: elige religión y podrás descubrir un universo que a la vista de otros no puede estar.

La enseñanza del Islam en España debería llegar al 10% de los alumnos pero no todos tienen profesores de religión

LA ENSEÑANZA DEL ISLAM Y OTRAS RELIGIONES EN LOS COLEGIOS PUBLICOS DE ESPAÑA. Un informe del periodista Henrique Mariño titulado «Radiografía de la asignatura de religión islámica en España: sólo puede estudiarla 1 de cada 10 alumnos musulmanes» concluye que «apenas 10 regiones cuentan con maestros que la enseñen, aunque algunas sólo destinan 1 o 2, por lo que la oferta resulta insuficiente. Sorprende la ausencia de docentes en Catalunya y Murcia, por lo que la Comisión Islámica de España exige que las Administraciones posibiliten que los niños ejerzan su derecho a profundizar en su credo si hay demanda». El periodista Miguel Cabrera ha investigado la cuestión y apunta que «casi un 70% de los niños de la provincia de Almería (37.942 alumnos, que suponen un 69,62%) estudian alguna religión, aunque la católica sigue siendo, lógicamente, la mayoritaria, puesto que la cursan casi 6 de cada 10 alumnos en los colegios públicos (un 59,73%), según los datos de este curso facilitados por la Delegación provincial de Educación».

«Son exactamente 37.942 los alumnos de Infantil y Primaria que estudian religión católica. Frente a esa gran mayoría católica, los alumnos de Infantil y Primaria que estudian religión islámica en centros públicos almerienses son en la actualidad, según la Junta, 5.933, que suponen el 9,34% del total, si bien en este caso, al igual que sucede en Secundaria, los musulmanes que viven en Almería se enfrentan al problema de la falta de profesores, debido a “problemas burocráticos y de coordinación entre la Junta y el Gobierno”, según Abdallah Mhanna, presidente del Centro de Imanes de Almería y profesor de religión islámica en el Colegio El Puche. Mhanna también pone en duda los datos de la Consejería: “Ahora mismo hay solo diez profesores en Almería, que a lo sumo podemos impartir la materia a 4.000 estudiantes”, indica el periodista Miguel Cabrera.

«Además, señala que otros 10 maestros están esperando ser autorizados por el Ministerio y la Junta, aunque en realidad, según sus datos, en la provincia serían necesarios al menos 50 o 60 profesores para todos los niveles educativos hasta bachillerato, que serían alrededor de 17.000 (12.000 de infantil y primaria y 5.000 de secundaria). Es decir que la demanda real es mucho mayor a la de los alumnos que pueden recibir clase de religión islámica, y se dan casos, incluso, de centros que cuentan con un gran número de niños musulmanes que no pueden optar siquiera a esta asignatura por falta de profesores. Esto sucede, por ejemplo, en el Colegio de Educación Infantil y Primaria Virgen del Rosario de Roquetas de Mar, que pese a contar con más de un 60% de sus 280 alumnos musulmanes, y de que los padres demandan la asignatura de religión islámica, a día de hoy no se puede ofrecer porque no tiene profesor», concluye el reportaje.

Majadahonda Magazin