Los pasajeros de Villalba y Majadahonda sufrieron momentáneamente un hecho parecido al de la película «El secuestro del bus 300» (2018) que describe la historia real de 41 pasajeros y un conductor de autobús en Israel en la década de los ochenta.

MANU RAMOS. La Delegada del Gobierno en Madrid, Mercedes González, residente en Majadahonda, ha precisado este viernes 21 octubre (2022) que Khalid, el joven perturbado magrebí de 23 años que secuestró el pasado miércoles el autobús interurbano Villalba-Majadahonda tras golpear al conductor, no está vinculado a la banda juvenil de los Blood, según fuentes policiales. Tras ser detenido por la Policía, el joven se encuentra ingresado en la Unidad Psiquiátrica de la Fundación Jiménez Díaz debido a que sufría un trastorno mental. Mercedes González afirma que «la Guardia Civil conoce mucho a esta persona. Quiero trasladar calma a la ciudadanía porque no tiene ninguna relación con bandas, que está enferma y que cometió ese delito por el que desgraciadamente está en el hospital y espero que se mejore cuanto antes. No tiene ninguna pertenencia a esa banda», ha señalado la delegada del Gobierno. Según las primeras informaciones de testigos, el joven podría padecer algún tipo de trastorno psicológico. En la mañana del miércoles le había dado el alto la Guardia Civil en Villalba debido a su estado de agitación y con signos evidentes de que no se encontraba en plenitud de condiciones o que estaba drogado«, afirma el periodista Luis F. Durán de El Mundo.


Luis F. Durán

LE RETIRAN EL DELITO DE «RETENCION ILEGAL» POR ESTAR «LOCO». Sin embargo, el periodista sostiene que sí es miembro de una banda: «tras su detención por el secuestro del autobús, los agentes del grupo de Bandas Latinas de la Guardia Civil fueron avisados de su arresto y señalaron que el apresado estaba vinculado con esa grupo. El joven fue identificado el año pasado por los agentes de la Guardia Civil durante una operación que permitió desmantelar la organización de los Blood Madrid, que contaba con varias secciones en la región. El arrestado estaba implicado en varios robos con violencia y agresiones muy graves. Tiene antecedentes por amenazas, daños, atentado a la autoridad y robo con violencia e intimidación. En el hospital permanecía custodiado por la Policía acusado de los delitos de coacciones, amenazas, robo con violencia y desórdenes públicos. Finalmente, no le han imputado el delito de retención ilegal. La banda de los Blood (sangre en inglés) son de origen latino pero mucho de sus integrantes son jóvenes magrebíes, de Europa del Este y españoles. Su símbolo es el rojo y tienen bloques o grupos en varios puntos de Madrid: Alcalá, Alcorcón y Villalba. Tienen relación con la delincuencia común, realizando robos con violencia y agresiones graves y no dudan en utilizar los machetes en los enfrentamientos con otras bandas».

8 PASAJEROS CON CRISIS DE ANSIEDAD Y EL CONDUCTOR ATENDIDO. Los hechos ocurrieron sobre las 13.05 horas de este miércoles en un autobús de la línea 685, que une Villalba y el Hospital Puerta de Hierro de Majadahonda. En una parada de la primera localidad montó el joven magrebí quien, al enterarse del destino, empezó a gritar para que le llevaran a Madrid capital. Aunque no usó ningún tipo de arma, se mostró muy violento, golpeó al conductor en el pecho y le obligó a desviarse en la ruta camino de Moncloa, entrando por la A-6. En el trayecto se vivieron momentos de pánico y nerviosismo entre varios pasajeros, ya que en un momento dado el infractor cogió el volante del vehículo. Una de las viajeras llamó a su padre y le contó lo que ocurría. Este, inmediatamente después, comunicó con el 112, que derivó el aviso a Guardia Civil y Policía Nacional, que estaban esperando a este individuo en la estación de autobuses de Moncloa. Pero poco antes de entrar en los túneles de Moncloa, en la avenida de la Memoria, el individuo obligó al conductor a parar el autobús, momento que aprovechó para pegar a una pasajera, robarle 50 euros y bajarse del vehículo. Sin embargo, la Policía había montado un dispositivo y logró arrestarle muy cerca, en el Paseo de Moret. A la llegada del autobús a la dársena, sanitarios del Samur-Protección Civil y del Summa-112 atendieron a 8 pasajeros por leves crisis de ansiedad y lesiones por forcejeos, y también al conductor del autobús, que recibió un leve golpe en el pecho. Ninguno necesitó traslado hospitalario, informó a Europa Press un portavoz de Emergencias Comunidad de Madrid.

Majadahonda Magazin