A Julia Serrada (Majadahonda) le tocó el viaje a Canarias ©La Provincia

LIDIA GARCIA. «De la UCI de Puerta de Hierro al baño en la playa. Treinta sanitarios descansan en las Islas tras estar en primera línea de batalla contra el coronavirus». El diario «La Provincia» de Las Palmas de Gran Canaria informa que con apenas 22 años, la enfermera Julia Serrada presenció en lo peor de la pandemia «cosas que yo jamás pensé que vería en mi primer año de trabajo». Ahora, podrá deleitarse con los hermosos paisajes de Tenerife al ser una de la ganadoras de la campaña de Promotur «Te lo mereces. Entra en Fase de Tranquilidad«.


«La expectación mediática rodeó al vuelo procedente de Madrid en el que, además de expertos internacionales de turismo, llegaron también unos héroes y heroínas sin hacer ruido, con el rostro relajado y la sonrisa fijada en el rostro. Se trataba de una treintena de sanitarios que aterrizaron en Gando con sus acompañantes para disfrutar de un merecido descanso después de luchar contra el coronavirus en turnos interminables. Unos profesionales de la salud que habían resultado ganadores del concurso que Promotur Turismo de Canarias organizó dentro de la campaña promocional «Te lo mereces. Entra en Fase Tranquilidad», centrada en atraer al visitante peninsular. Con apenas 22 años, la enfermera Julia Serrada, que trabaja en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de Puerta de Hierro, en la localidad madrileña de Majadahonda, jamás imaginó que tras terminar sus estudios fuera a presenciar escenas tan duras. «No esperaba que en mi primer año de trabajo iba a ver las cosas que he visto». La experiencia le afectó tanto a nivel psicológico como físico -«llegaba a casa y no quería comer sólo quería dormir, todos los días eran lo mismo», añade el artículo.

Para Serrada, fue muy duro tener que explicar a los enfermos por qué unos podían bajar a la UCI y otros no. «Cada vez había más ingresos y si había camas libres teníamos que valorar muchos factores para decidir a quién se ingresaba». Pero mucho peor fue la soledad de los pacientes. «Había mucha gente triste, gente sola y ver morir a personas sin compañía fue lo peor de todo», aseguraba esta enfermera que reconocía que es ahora cuando empieza a gestionar lo vivido durante la pandemia porque antes no había sido capaz de reaccionar. Ahora, Serrada podrá disfrutar de los paisajes de Tenerife, donde lo primero que hará será darse un baño en la playa y descansar después de los turnos interminables y de la UCI repleta. Eso sí, lo hará sin dejar de lado la responsabilidad. «Voy a disfrutar pero siempre con cabeza, manteniendo la distancia de seguridad, algo sencillo que está en manos de todos», concluye el reportaje.

 

Majadahonda Magazin