JULIA BACHILLER. La Parroquia de Santa Catalina de Majadahonda celebró este viernes 11 y sábado 12 de septiembre (2020) la primera eucaristía del Triduo en homenaje al patrón de Majadahonda, el Santísimo Cristo de los Remedios. Este domingo 13 a las 20:00 horas se realizan las otras dos celebraciones. Y el lunes 14 a las 12:00 horas con la Misa Mayor se dará por finalizado el recuerdo y homenaje que cada año Majadahonda realiza a su patrón. “La verdad es que se hace raro en este año comenzar el Triduo sin tener la imagen del Cristo de los Remedios aquí en la iglesia. Pero las circunstancias son las circunstancias y así nos encontramos”. Con estas palabras el párroco de Santa Catalina, Juan Francisco Pérez Ruano, comenzaba su homilía. La novedad fue que entre las lecturas correspondientes estaba la que realizó el diseñador de moda de Majadahonda, David de Calle.
Es la primera ocasión en los últimos 10 años en Majadahonda que el propio párroco es el encargado de predicar el Triduo del Cristo. Y la primera vez que el Cristo de los Remedios no está presente en la iglesia. En otros municipios se ha optado por el traslado de las imágenes en procesión privada para ser veneradas en el templo. Con ello se evita el acompañamiento de los vecinos y el contacto con la imagen. Su presencia, por ello, se echa en falta porque es inevitable recordar que en momentos difíciles, como son las épocas de pandemia, los creyentes recurren a encomendarse a los Santos o Vírgenes que por diversas razones les trasmiten más devoción, aplacando de alguna manera el desasosiego que padecen. Esto es algo que tan solo pueden comprender los que practican la doctrina cristiana.
Retomando la celebración de la misa, en esta primera ocasión el párroco habló en su homilía de la leyenda sobre “El árbol de la vida”. Con ella intentó dar una explicación de donde procedía el madero con el que se crucificó a Cristo: “Cuando Adán estaba a punto de morir, sintió la necesidad de volver a oler, de volver a sentir el olor del árbol de la vida. Mandó a su hijo Set que fuera a los extremos del mundo para pedirle a San Miguel una rama del árbol de la vida. San Miguel le entregó tres semillas (la del Ciprés como signo de la Muerte, el Cedro como signo de la Eternidad y el Olivo como signo de la Vida y de la Paz). Y Set las lleva a su padre Adán para que vuelva a oler el árbol de la vida. Muere Adán y Set planta sobre su tumba las tres semillas, de las cuales crece un árbol con numerosas ramas». Y el relato continua con el destino tanto de las ramas del árbol como del propio árbol una vez talado.
Al tratarse de un mito, Juan Francisco Pérez Ruano añadió: “toda leyenda tiene una gran verdad: el mensaje que transmite”. Y lo explicó así: “Aquel árbol que Dios había puesto en el centro del Paraíso para el disfrute de todos, pero sobre todo para los que vivían en el Paraíso, había sido creado por Dios solo por amor”. A lo que añadió: “Dios no te deja comer de ese árbol porque Dios no te quiera, ese es el truco de la serpiente. Por contra, Adán y Eva van a creer en la serpiente y van a querer ser como Dios. Ahí empieza el problema, cuando queremos ser como Dios, cuando queremos ser Dios. Hoy es un ejercicio útil darnos cuenta y descubrir como también a nosotros nos engaña la serpiente en nuestra vida cotidiana y nos quiere hacer creer que somos como Dios».
Y de ese «ego» surgen «todos los enfrentamientos, todas las discordias, la soberbia, y en una palabra, la destrucción”. El sacerdote finalizó recordando que “si por el fruto de un árbol todos nos condenamos, por el fruto del nuevo árbol de la vida todos somos salvados. ¿Cuál es ese fruto? Cristo, Jesús, el Señor. Colgado de una Cruz reconcilia al hombre con el hombre y a Dios con el hombre”. Y concluyó con una petición al Cristo de los Remedios: “que no nos separemos nunca de él, para que podamos vivir como auténticas personas libres en el Amor de Dios. En la libertad del Amor de Dios”. Finalizado el acto litúrgico, destacó la presencia de los miembros de la Hermandad del Cristo de los Remedios y Virgen de la Soledad de Majadahonda, así como los concejales de Vox Pedro Mallén y Pablo Pérez, únicos representantes del Ayuntamiento. En todo momento se guardaron las distancias y medidas de higiene así como el aforo permitido para la realización de este tipo de actos.
Muy bonito y Davi estuvo fantastico
Estuvo precioso.
Gracias Julia por tu entrañable reseña