«Buenos días, sobre la noticia publicada de un octogenario que al señalizar su vehículo averiado en la M-40 fue trágicamente arrollado por un todoterreno, les paso nota informativa con autorización de la familia del fallecido por si pudiesen dar una reseña. Les estaría agradecida. El fallecido era el popular barítono Antonio Lagar. Saludos». Nuestra lectora Rosario Rey ha hecho llegar este obituario a MJD Magazin, que procede por ello a su publicación, trasladando nuestras condolencias y nuestro más sentido pésame a la familia por la irreparable pérdida. Fallece el reputado barítono Antonio Lagar. Hoy el cielo azul se ha escondido bajo nubes grises a punto de soltar sus lágrimas, hoy la música suena a duelo. El barítono Antonio Lagar ha fallecido a los 81 años tras un trágico atropello mortal en la M-40, en Madrid. Se ha ido sin sufrir, dejando de luto su espléndida carrera musical. Antonio Lagar nació en Madrid el 6 de agosto de 1937. Sus estudios musicales los realizó en la Escuela Superior de Canto de la capital de España, con Lola Rodríguez Aragón e Inés Rivadeneyra. En 1972 debutó en el Teatro de La Zarzuela en la Compañía de José de Luna cantando La Rosa del Azafrán. A continuación, en el Teatro Monumental de Madrid realizó su primera temporada de zarzuela con esa misma compañía, cantando, además de la obra citada Los Gavilanes, Katiuska, La Dolorosa y La del Manojo de Rosas, que cantó de nuevo en La Zarzuela en 1974.


Ese mismo año interpretó La Tabernera del Puerto en el desaparecido Teatro Martín. Regresó de nuevo a La Zarzuela en 1975 de la mano de Antonio Amengual cantando Katiuska, Molinos de Viento y Marina. Al año siguiente entró en la Compañía Isaac Albéniz de Juan José Seoane, representando La del Soto del Parral, Luisa Fernanda y Katiuska. En 1979 con la Compañía Lírica Nacional interpretó en La Zarzuela El Caserío, obra que ha representado en diversas ocasiones por el País Vasco. En 1986, en unión de la soprano María Dolores Travesedo, formó la Compañía Lírica Musiarte, con la que ha recorrido toda la geografía española representando los títulos más característicos del género, y otros que no se llevan con tanta frecuencia a los escenarios, tales como La Pícara Molinera, Don Manolito, El Gaitero de Gijón o La Picarona. En enero de 2006 recuperaron Fuenteovejuna, de Moreno Buendía, que ha protagonizado junto a Josefina Meneses, a los veinticinco años de su estreno, según el texto que figura en la web La Zarzuela. Lagar se ha marchado trabajando hasta el último momento en su música, su mundo, ése que quedará para siempre grabado en las miles de personas que pudieron disfrutar de su arte en primera persona. La música está hoy de luto, pero su música y su voz serán eternas.

«Recordaré una frase célebre del maestro Sorozábal: «El artista tiene tres salidas en España: por tierra, mar y aire». El Diario Lírico realizó esta entrevista a Antonio Lagar, cuya parte biográfica reproducimos por su interés y testimonio histórico-artístico: «En mi familia eran grandes aficionados; desde niño me llevaban a las temporadas líricas y desde pequeño mal cantaba los fragmentos más conocidos. Al inaugurarse la Escuela Superior de Canto de Madrid ingresé en ella, destinado a Inés Rivadeneira y durante unos meses trabajé con Lola Rodríguez Aragón. Lola estaba convencida de que yo era tenor, era muy joven y tenía tesitura aguda muy fácil -Sí b-Sí natural-, pero no aguantaba la tesitura, y el color era baritonal (quería ser Mario del Mónaco), lo dejamos».

«Las grandes voces de los sesenta, Bastianini, Tito Gobbi, Aldo Protti, Mario de Mónaco, Gigli, Tebaldi, Callas, entre otros; considero que fueron los grandes años de la ópera. Desde mi debut en 1972 en el Teatro de La Zarzuela con la Compañía de José de Luna, he cantado mucha ópera, conciertos sinfónicos (durante varios años fui llamado para la mayoría de ‘Carmina Burana’ que se hacían por España) y prácticamente todo el repertorio de zarzuela. Barítono lírico, de aceptable volumen. En algunas críticas se me ha calificado como barítono verdiano. ‘Katiuska‘ me ha dado las mayores satisfacciones todas las veces que la he representado, que han sido muchas. Como empresario, comprendo al cantante y en mí siempre tienen a un compañero, que ahora está al otro lado (de la escena) pero que sigue sintiéndose uno de ellos, nunca empresario frente a contratado». Lea la entrevista completa.

Majadahonda Magazin