Las «Casas Rojas»: un derribo judicial que oculta otra foto que el Ayuntamiento intenta distraer

JULIA BACHILLER. Como va siendo habitual, el Equipo de Gobierno PP-Vox en el Ayuntamiento de Majadahonda recoge los frutos de sus antecesores y se atribuye la recolección como méritos propios. Con ello nos referimos al derribo de las llamadas “Casas Rojas”, situadas en la calle Neptuno. Las declaraciones oficiales muestran una vez más un desconocimiento de lo que ocurrió aquel mes de septiembre de 2018 y lo que sucedió en los días anteriores y posteriores al desalojo. Según el alcalde, “tras muchos años, ponemos fin a una irregularidad urbanística que solo había traído «okupación» e inseguridad a la zona: ya se está derribando el edificio abandonado de la calle Neptuno. Atraemos inversiones y facilitamos la labor de la iniciativa privada. Majadahonda se mueve”.


Julia Bachiller

Julia Bachiller

Para su socio, el concejal de Familia de Vox, “las Casas Rojas por fin son demolidas. Años de espera, exceso de edificación, okupas, desalojos… Desde hace dos años Majadahonda ha comenzado a cambiar. Gracias a Vox”. La realidad es bien distinta. La decisión fue exclusivamente judicial y el derribo y construcción corre a cargo de una empresa privada, la cual sufragará todos los gastos ocasionados y a la cual ambos políticos ni mencionan. El alcalde vuelve a primar su fotogenia y el concejal de Vox se suma a su trayectoria y ejemplo. ¿A que se debe esta nueva apropiación indebida? ¿Que se esconde detrás de esta cortina de humo? Ambos han eludido hacerse eco de otro suceso urbanístico que provocó un gran escándalo en Majadahonda y que se ha producido de forma simultánea: con ello nos referimos al tanatorio de Roza Martín, que como puede apreciarse en las imágenes, su edificación se ha realizado durante la presente legislatura PP-Vox y ante el cual curiosamente ninguno de los dos se ha fotografiado. Un enorme edificio que destaca por el mármol negro de su fachada y por la identificación en letras blancas “Tanatorio de Majadahonda”, que da la bienvenida a todo el que accede a la urbanización. 


El Tanatorio de Roza Martín ha concluido sus obras junto a un colegio

Al otro lado de la calle, los alumnos y profesores del prestigioso colegio “Thames British School” tienen que visualizar este tipo de instalación como parte del entorno urbanístico que les rodea. De nada sirvieron en su día la movilización de estos vecinos, el silencio administrativo y la negativa del grupo Ciudadanos a otorgar un voto a favor de su entonces socio de gobierno (PP) para subsanar este error urbanístico cometido. Y su confirmación por los actuales gobernantes da como resultado esta construcción en un lugar tan inadecuado. En compensación a los errores del pasado el nuevo gobierno PP-Vox ha facilitado una tardía pero necesaria línea de autobuses (654), una central de recogida neumática de basura y una pasarela que podría definirse como “a ninguna parte”, estas dos últimas, por cierto, iniciativas del anterior Equipo de Gobierno de Narciso de Foxá.

A los concejales de PP y Vox no se les vio cuando se produjo la «okupación» de las Casa Rojas: hoy van a «hacerse la foto» del derribo

Retomando el caso de las “Casas Rojas”, nuestro medio de comunicación local vivió en primera persona lo acontecido en los días previos y el tenso momento del desalojo. Ahí está la hemeroteca para comprobarlo. Su derribo no es ahora cuestión de orgullo ni medallas, pues allí se vivieron momentos sumamente desagradables, empezando por los vecinos que han sufrido durante años las consecuencias de la ocupación de estas viviendas, los insultos provocadores a las fuerzas de seguridad allí desplazadas, así como a los medios de comunicación que allí nos encontrábamos. Incluso un compañero de Telemadrid padeció una agresión en forma de lanzamiento de objetos. No se vio entonces a ningún concejal de Majadahonda, ni del Gobierno ni de la Oposición, ni rastro del PP o de Vox. 

Septiembre de 2018: desalojo de los «okupas» de las «casas rojas». No se vieron concejales de PP y Vox

Lo que sí ocurrió es que toda aquella situación provocó la expulsión de MJD Magazin de la Casa de la Juventud cuando el partido político Podemos había organizado una reunión de valoración de lo sucedido durante el desalojo de la mañana. En un ataque de «asamblearismo«, se sometió a votación el derecho constitucional a la información y resultado de la misma nuestra presencia fue denegada. No reclamamos ninguna medalla por la defensa de la libertad de expresión y de prensa en aquellos arriesgados momentos porque forman parte del quehacer diario de los medios de comunicación pero ver ahora a determinados políticos presumir de lo que ni hicieron ni padecieron aflora una desfachatez y una impostura digna de mejor causa. Esto es un breve resumen de lo allí acontecido: en nada enorgullece que una ciudad como Majadahonda se vea expuesta a este tipo de situaciones y menos por errores administrativos del gobierno municipal, sea quien sea que lo dirija.

La otra «foto» que los vecinos de Roza Martín no han visto pero nunca olvidarán

Tan solo nos queda esperar que el gobierno PP-Vox realice su próxima fotografía junto a comentarios como «el índice de contagios ha remitido en Majadahonda«, «las calles destacan por su accesibilidad y limpieza», «los vecinos de la Plaza de la Constitución ya pueden dormir tranquilos», «el botellón ha dejado de ensuciar campos y calles», «el prometido asfaltado de las calles se ha hecho realidad», «las calles del interior de la ciudad brillan por su alumbrado», «los músicos callejeros desaparecen de la calle central», «las bicicletas son para el verano pero no para la Gran Vía»… Y así un largo etcétera para el cual nos armaremos de paciencia… hasta las próximas elecciones.

Majadahonda Magazin