“El acto del 10 de enero tuvo su secuela el pasado sábado 17 de enero. Por desavenencias internas en los conservadores de la tradición franquista en Majadahonda, este año se han celebrado dos eventos de apología fascista frente al monumento. El brazo en alto, el himno de la Guardia de Hierro de Rumanía y el Cara al Sol no faltaron para cerrar los actos”. Las redes sociales han recordado este fin de semana como en 2015, el periodista Diego Barcala de “El Diario.es” daba a conocer 6 días después en un caso y 13 días después en el otro, un doble acto que tuvo lugar en Majadahonda. Nadie se hubiera enterado si no fuera por que se produjo “dos días después de que todos los líderes mundiales marcharan en París contra el odio racista y religioso que amenaza la libertad en Occidente”, decía Barcala: “Nosotros no somos Charlie Hebdo, esos eran unos miserables que bien muertos están porque por cada ofensa al islam, hacían 10 o 100 contra la cristiandad«, declaró el presidente del partido ultraderechista Alianza Nacional, Pedro Pablo Peña, en el homenaje a dos legionarios rumanos muertos en Majadahonda en la Guerra Civil”.



Dos años después de ese 2015, en este 2017, era un comunicado del PSOE, seguido posteriormente por el de otros 4 partidos, el que advertía de la efemérides. Hasta MJD Magazin llegaban desde un mes antes, anuncios de la convocatoria, que estaba pasando desapercibida en la ciudad. Pero la nota pública socialista le puso la lupa y el altavoz y ya no pudo detenerse la amplificación. PCE, IU, Somos y Podemos hicieron el resto. La noticia de 2015 también generó polémica, algo inherente a este tipo de informaciones. “Por cierto, el titular es manipulador y tendencioso por tres motivos”, le replicaba un lector de «El Diario.es» al periodista Diego Barcala:

1º. La ley orgánica 9/1983 dice, en su capítulo II, artículo 3: «1. Ninguna reunión estará sometida al régimen de previa autorización.»
2º Según citada ley orgánica, solo la autoridad gubernativa, en este caso el delegado del gobierno, puede prohibir la reunión y solamente cuando concurra alguno de los siguientes casos: «Si la autoridad gubernativa considerase que existen razones fundadas de que puedan producirse alteraciones del orden público, con peligro para personas o bienes…»
3º Y porque, según la citada ley en su capítulo I, artículo 2: «Se podrá ejercer el derecho de reunión sin sujeción a las prescripciones de la presente Ley Orgánica, cuando se trate de las reuniones siguientes:

c) Las que celebren los Partidos políticos, Sindicatos, Organizaciones empresariales, Sociedades civiles y mercantiles, Asociaciones, Corporaciones, Fundaciones, Cooperativas, Comunidades de propietarios y demás Entidades legalmente constituidas en lugares cerrados, para sus propios fines y mediante convocatoria que alcance exclusivamente a sus miembros, o a otras personas nominalmente invitadas.» Así que, ni es necesaria autorización para reunirse, ni es el ayuntamiento el que puede prohibir la reunión y ni la reunión está sujeta a la ley orgánica por haber sido convocada por una asociación legalmente constituida, en un lugar privado y cerrado”, concluía.

Pero otro lector replicaba: “Algunos de los que comentan aquí quieren hacerse los «inteligentes» sacando a relucir la famosa «Ley Orgánica 9/1983, reguladora del derecho de reunión» defendiendo a estos canallas, amparándose en que van a tomar tacitas de té. Miren, estos tipejos lo que hacen es incitación al odio por razones de raza o etnia, algo penado por el artículo 510 del Código Penal y la apología del genocidio (franquismo en este caso) penado en el artículo 607.2. Además la apología del fascismo está condenado en la Declaración de los Derechos Humanos de 1948. No me extraña que no se castigue y además se permita, se justifique y se defienda teniendo en el poder a un partido cuyo fundador (Manuel Fraga) fue ministro (entre otros muchos cargos) de la dictadura de Franco”.

Fuente:

El Diario.es

Majadahonda Magazin