Atascos y Contaminación: Majadahonda está rodeada por 4 grandes carreteras de enorme circulación: A-6, M-50, M-40 y M-503. El «pulmón» del Monte del Pilar a veces no puede drenar tanto tráfico diario laboral, según afloran los indicadores biométricos

FEDERICO MTNEZ. El pleno del Ayuntamiento de Majadahonda del mes de enero (2023) ha puesto de nuevo sobre el tapete uno de los problemas que más quebraderos de cabeza produce a los vecinos: los atascos y consiguiente contaminación matutina que afecta al 80% de la población que se desplaza a diario a Madrid y cuya solución les parece a los concejales imposible. Aunque es cierto que en Majadahonda se transita en vehículo privado de forma fluida –salvo las mañanas laborables de atascos en las radiales y acceso a la carretera de la Coruña– se han producido durante toda esta legislatura (2019-23) quejas de los vecinos en las 3 únicas zonas altamente transitadas de la Zona Centro. Son la calle Doctor Calero –donde se forman numerosos atascos con los autobuses y que ha dado lugar incluso a la creación de un Colectivo de Afectados Contra la Contaminación en Majadahonda–, su prolongación en la Avenida Dr. Marañón y La Granadilla (expresado por sus comerciantes) en días de Mercadillo (martes y sábados). Además, existe un cierto espejismo con respecto a la supuesta calidad del aire de Majadahonda respecto a Madrid: los controles científicos y biométricos afirman lo contrario, pues los «atascos» de las 4 autopistas y radiales que circundan la ciudad (A-6, M-50, M-40 y M-503) elevan considerablemente el nivel de contaminación, según revelan estas mediciones.


Federico Mtnez

En este último debate municipal se evitó indicar que tanto el impopular «Madrid Central«, que le costó el puesto a la anterior alcaldesa, Manuela Carmena (Podemos), por el «talibanismo» en la aplicación de las sanciones (multas), como su actual prolongación y ampliación por el actual alcalde Martínez Almeida (PP), que tanto se oponía antes de llegar al poder, son una imposición de la Unión Europea por las altas tasas contaminantes en España. Estas restricciones a las ciudades de más de 50.000 habitantes (afecta a Majadahonda, Las Rozas, Pozuelo, Villalba y Boadilla en el Oeste de Madrid), también son de obligado cumplimiento. Y los Ayuntamientos que las incumplan pueden ser objeto de fuertes sanciones económicas, que no las pagan los concejales sino los vecinos con sus impuestos. Lo de burlar la ley con las «trampas» que sugiere Vox y que acepta al PP ya lo dejo para Mortadelo y Filemón, Forges o los Picapiedra, que al parecer son los ejemplos más recurrente del actual equipo de Gobierno municipal. ¿Significa esto que estamos irremediablemente ligados al perenne atasco y la enfermedad pulmonar porque buscar una solución es una Misión Imposible al estilo de Tom Cruise y Brian de Palma?. Ciudades como Londres o Grenoble ya lo han conseguido y muchas otras posibilidades de transporte privado combinado, al estilo del exitoso bla,bla,car, se podrían explorar. Todo menos tirar la toalla y resignarse al valle de lágrimas permanente, las ocurrencias o las trampas e ilegalidades en las que a veces se convierten los debates municipales, tan huérfanos de rigor como de soluciones.

Majadahonda Magazin