JULIA BACHILLER. La parroquia de Santa María (Majadahonda) celebró este viernes su tradicional «Cena contra el Hambre» para recaudar fondos con destino a “Manos Unidas” y colaborar en los proyectos que lleva a cabo esta asociación. El acto consistía en una cena muy sencilla: migas, frutas, dulces, vino y agua, pero contó en primer lugar con la colaboración de las mujeres de la parroquia que prepararon tanto las migas como las mesas y se encargaron de servirlas, tras lo cual también llevaron a cabo una rifa de objetos donados por diversos comercios de Majadahonda. Impresionante labor la de estas voluntarias. El acto comenzó con el agradecimiento del párroco de Santa María, José Fernando López, a los que allí estaban, representantes de las cinco parroquias de Majadahonda y miembros de ellas: Santa María, Santa Catalina, Beato Manuel Domingo, Santo Tomas Moro y Santa Genoveva. Gran número de personas llenaron la sala y tras la presentación y agradecimientos José Antonio Soto y el padre Germán Arconada les dedicaron unas palabras.

Jose Antonio Soto

José Antonio Soto, voluntario de Manos Unidas que colabora como miembro de la Parroquia de Santa María, habló sobre los proyectos del año pasado: una escuela de primaria en Sierra Leona y otra de primaria y secundaria en la República Democrática del Congo. Manos Unidas ha conseguido dotar de medios educativos y profesores a estos dos lugares. El nuevo proyecto está ubicado en los suburbios de Delhi, donde hindúes migrantes de diferentes estados se han establecido y han acabado formando un poblado de chabolas junto a un vertedero de basura. Carecen de alimentos y agua potable, lo que les ocasiona infecciones y problemas de salud. El objetivo de “Manos Unidas” es que 900 mujeres tengan acceso a micro-créditos a través de “Self Help Groups” (los miembros hacen pequeñas contribuciones de ahorro regulares durante algunos meses hasta que se cuenta con el capital necesario para empezar a prestar). Y que 150 jóvenes adquieran capacidades para poder emplearse, además de que los niños de 6 a 15 años estén escolarizados.

German Arconada

Por su parte, el padre Germán Arconada, Padre Blanco (así se llama a los misioneros que prestan sus servicios en África) que por segundo año acude a este evento en Majadahonda –y que después de haber prestado su colaboración en África durante 51 años regresa a España–, dejó claro que su intención no es otra que regresar al continente vecino. Después de sus intervenciones, los jóvenes de la parroquia cantaron una canción con sus guitarras, la cual fue acompañada por los allí presentes. Tras la cena tuvo lugar la tradicional rifa, a la que también contribuyeron concejales de PP, Cs, PSOE, IU, Centrista y hasta dos ex ediles de UPyD, información que ampliamos en otra noticia.

El párroco de Santa María

Majadahonda Magazin