MIGUEL SANCHIZ. José Fernando Martín-Cinto es empresario, licenciado en Ciencias Físicas por la Universidad Complutense y actualmente desarrolla su trabajo de ingeniería civil en Buenos Aires, condiciones más que suficientes para protagonizar este sábado 9 de julio (2022) la sección «Gente Maja que se Moja«. Además, «dediqué muchos años con mi grupo de empresas CEICO al desarrollo de grandes bienes de equipo para la industria petroquímica, como hornos, torres de refrigeración, antorchas e intercambiadores de calor. Lo hice con una empresa importante en inspecciones industriales por métodos no destructivos de nombre IGC, teniendo por socios en Europa a Socotec de Francia, SGS de Suiza y TUV Baviera de Alemania». En la actualidad colabora con grupos de inversión y desarrollo a través de una empresa de fabricación de ventanas y cristaleras que se llama Alufuen International. Y con esta experiencia, en esta entrevista realiza un interesante análisis sobre la situación energética de Europa y de España.

¿Como ve usted la situación de la electricidad en España? –Desde mi punto de vista, creo que ha habido cierta precipitación, en aras del llamado control del medio ambiente, al promover el cierre de todas las centrales térmicas. Como ejemplo ahí está Alemania, que las tiene funcionando. Por otra parte el suspender en su día el plan de centrales hidroeléctricas por considerar por un tema político no asumible el «plan de pantanos», ha sido un gran error y para ello no hay más que ver que España está atravesada de cadenas montañosas en todas direcciones.

¿Por qué? –Se ha impulsado, creo que excesivamente, el desarrollo de energías alternativas como los paneles solares o los aerogeneradores: a la larga se verán los costes reales, que hoy en día siguen siendo de una gran opacidad. En esta situación creo un disparate prescindir de las centrales nucleares que aportan una energía limpia y constante, totalmente competitiva y con unas grandes condiciones de total seguridad. Francia sabe lo que hace y no sólo no las cierras sino que pone un plan en marcha a base de reactores individuales (mini) para cubrir la demanda por zonas. Ante este panorama veo muy problemático que no suba el precio de la electricidad en España de manera muy importante.

Pasemos ahora a su esfera más personal. ¿Cree usted que la espiritualidad tiene alguna relación con la paz en el mundo? –Empiezo por decir que, desde mi punto de vista de católico practicante y convencido de la verdad del mensaje, tanto de Dios en el Antiguo Testamento como del Hijo de Dios, Jesús nuestro Señor, en el Nuevo Testamento, el hombre sólo puede encontrar la verdadera paz al descubrir y asumir el amor de Dios como motor de nuestra vida. Así, no sólo se encuentra la verdadera paz sino la verdadera felicidad de la unión con el Señor. Respecto a la relación que me pide entre paz y espiritualidad y para no extenderme, sólo le indico algún ejemplo. Toda la cristiandad, por petición expresa de la Virgen María, estuvo rezando el rosario sin parar y se consiguió la victoria del cristianismo sobre los otomanos en la batalla de Lepanto.

¿Y algún ejemplo más reciente? –Después de visitar Juan Pablo II el Santuario de Fátima, se entrevista con Gorbachov y sin causa aparente inmediata, cae el Muro de Berlín y en tiempo récord se independizan todas las repúblicas socialista soviéticas, desapareciendo la URSS para siempre. No me puedo extender pero espero que estas pinceladas puedan servir positivamente y desde luego estaré siempre dispuesto a contestar comentarios e informaciones adicionales de quien las requiera.