Estudio de la Universidad de Murcia. Adaptación al Grado en Turismo. Ordenación de los Espacios Turísticos. Ensayo sobre la Movilidad Sostenible en Majadahonda, Madrid. 7 de diciembre de 2023.

FLOR CARPALLO BALTASAR. En este caso, se va a analizar la situación de Majadahonda, localidad situada al Oeste de la Comunidad de Madrid, a poco más de 15 km de la capital. Se encuentra en una de las zonas más desarrolladas de España y tiene una de las mayores rentas per cápita del país: en el año 2021 se sitúa en el puesto 8. (INE, 2023). Antiguamente, su escasa población vivía de la agricultura y de la ganadería. En los años 70 contaba con poco más de 5.000 habitantes, pero gracias a su situación estratégica respecto a Madrid ciudad y los planes urbanísticos que ha sufrido, la población ha crecido llegando a los 73.528 habitantes en 2018, según fuentes del ayuntamiento. Su centro urbano es la Iglesia de Santa Catalina y a partir de ahí se ha ido urbanizando en todas direcciones, convirtiéndola en una localidad grande, moderna y llena de restaurantes y comercios. No cuenta con ningún atractivo histórico, pero sí con un mercadillo local que es visitado todos los martes y sábados por miles de personas que llegan de toda la Comunidad de Madrid e incluso desde otras partes de España.


Flor Carpallo Baltasar

EL FRACASO EN LA GESTIÓN DE LAS BICICLETAS: En el año 2010, el Ayuntamiento crea un plan de movilidad urbana sostenible del municipio para reducir la emisión de gases contaminantes y ruidos en hora punta, dentro del Plan Horizonte 2020. Las principales medidas a adoptar serían las siguientes: ampliación de zona peatonal (Majadahonda peatonaliza la Plaza de la Constitución, 2011), zona ORA, implantación de sistema de alquiler de bicicletas públicas eléctricas por la ciudad, limitación de velocidad del tráfico rodado, mejora de la accesibilidad del transporte público, microbús eléctrico urbano y proyecto de estacionamiento regulado en el hospital. A día de hoy, las mejoras que sí se han llevado a cabo de todas las comentadas son: ampliación de la zona peatonal, zona ORA e implantación de sistema de alquiler de bicicletas (cerrado en 2017 por deficitario, según fuentes del ayuntamiento).


Anterior legislatura: «La localidad aprobó en pleno municipal una moción para no implantar una ZBE, desacatando así la actual ley».

EL DESACATO DE ANTERIOR GOBIERNO SOBRE LA ZONA DE BAJAS EMISIONES Y LA RECTIFICACIÓN DEL ACTUAL ANTE EL DEFENSOR DEL PUEBLO. En abril de 2018 se presenta una moción por un grupo político de la Oposición para solicitar un plan de movilidad urbana sostenible en el municipio. Tras una votación, se acuerda realizar dicho plan. En septiembre de 2019, el alcalde firma la carta por la que se adhiere a la Semana Europea de la Movilidad para fomentar la movilidad sostenible y el respeto al medio ambiente. En febrero de 2021 se vuelve a presentar otra moción para solicitar el plan de movilidad urbana acorde con la Agenda 2030. De acuerdo con la normativa europea, las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Ley de Cambio Climático y Transición Energética para mejorar la calidad del aire y el ruido, las ciudades de más de 50.000 habitantes deberán contar con una Zona de Bajas Emisiones (ZBE) a partir de enero de 2023. (BOE-A-2021-8447, Ley 7/2021). La localidad aprobó en pleno municipal una moción para no implantar una ZBE, desacatando así la actual ley. Esta moción ha sido recurrida al Defensor del Pueblo. El 30 de noviembre de 2023 la nueva edil comunicaba al Defensor del Pueblo su compromiso a realizar una ZBE en la localidad y otros proyectos complementarios como un plan de movilidad escolar accesible y segura, mejora en los accesos de las paradas de autobuses, regulación a través de semáforos (actualmente no hay ninguno) y pasos de cebra inteligentes, entre otras.

«La segunda fase de la peatonalización se llevó a cabo sin un estudio de viabilidad adecuado, sin presentar un proyecto público que contara con las soluciones a los problemas de la obra y sin el apoyo de la Oposición, residentes y empresarios»

LOS PROBLEMAS EN EL BULEVAR CERVANTES. Como se puede observar, hay muchos planes para mejorar la movilidad sostenible del municipio, pero habrá que esperar para ver cuándo se hacen realidad. La única medida que se ha materializado, en cuanto a movilidad sostenible se refiere, es la peatonalización de ciertas zonas céntricas, aunque no exenta de polémica. En el año 1997 comenzó la primera obra con el soterramiento de una de las arterias principales de la ciudad, la Gran Vía. Anteriormente, esta calle de comercios y bares contaba con 2 carriles y doble dirección, pero después de la obra, se quedó con un solo carril en una única dirección. En 2010 se empieza una segunda fase de peatonalización de la principal calle del municipio y del Bulevar Cervantes (calle adyacente). La primera peatonalización, aunque con incomodidades para vecinos y comerciantes durante las obras, acabó con un balance positivo para todos. No tanto así la segunda fase, que se llevó a cabo sin un estudio de viabilidad adecuado, sin presentar un proyecto público que contara con las soluciones a los problemas de la obra y sin el apoyo de la Oposición, residentes y empresarios.

División de Majadahonda en 2 zonas: «Hay que dar una gran vuelta para acceder en coche de una zona a otra. Este tema sigue trayendo polémica, puesto que la accesibilidad en transporte ha empeorado en el municipio»

LA DIVISION DE LA CIUDAD EN DOS PARTES: MÁS TRÁFICO. Esta obra, en un primer momento iba a contar con un aparcamiento público para acoger las 192 plazas de aparcamiento que se eliminaban en superficie, además de otras donde los vecinos pudieran aparcar para acceder a la zona de comercios, pero finalmente el consistorio lo encontró deficitario y no se llevó a cabo. Además, la ampliación de la Gran Vía suponía la división de la localidad en dos partes, por lo que hay que dar una gran vuelta para acceder en coche de una zona a otra. Este tema sigue trayendo polémica, puesto que la accesibilidad en transporte ha empeorado en el municipio y la solución no es fácil. La zona de «Las Erillas”, donde se encuentra el recinto en que se celebra el Mercadillo, se ha quedado más inaccesible. Si se quiere llegar en coche, hay que bordear bastantes calles hasta acceder al mismo y los autobuses ya no pasan por esa zona.

«En Majadahonda no hay datos oficiales de los coches que circulan por el túnel, pero solo son unos cientos diariamente. Todos los vehículos que no pasan por aquí lo hacen por las calles adyacentes, lo que provoca atascos, ruidos, contaminación y falta de aparcamiento»

EL FRACASO DEL TUNEL DE LA GRAN VIA EN COMPARACIÓN CON EL DE LAS ROZAS. Poco se parece este túnel al del pueblo vecino de Las Rozas, que también soterró su calle principal, pero con mayor acierto. Ellos mantuvieron el doble sentido de la circulación, habilitándose así el tránsito a más de 3.000 vehículos al día. En Majadahonda no hay datos oficiales de los coches que circulan por el túnel, pero solo son unos cientos diariamente. Todos los vehículos que no pasan por aquí lo hacen por las calles adyacentes, lo que provoca atascos, ruidos, contaminación y falta de aparcamiento. Estos problemas se acentúan en la Avenida de España y calles Francisco Umbral y Doctor Calero. Para concluir, se puede observar cómo una medida de movilidad sostenible, que en un principio tendría que mejorar la vida de ciudadanos y comerciantes de un destino, se puede convertir en una pesadilla diaria para todos. La improvisación no sirve en estos casos, los proyectos deben ser viables, estudiados con exhaustividad, y los informes tienen que ser favorables para la mayoría de la población, solo así conseguiremos tener ciudades más seguras, accesibles y con menos contaminación.

Majadahonda Magazin