narciso-mercedesFEDERICO UTRERA. Narciso de Foxá, recién reelegido alcalde de Majadahonda, aborda en esta parte de la entrevista con MJD Magazin varios asuntos de interés ciudadano: la contratación de asesores técnicos externos para los grupos municipales y la bajada de sueldos del alcalde y concejales que acordó el pleno del Ayuntamiento de Majadahonda: «Yo creo que con los asesores se han producido muchos abusos. Estoy hablando de ayuntamientos del tamaño de Majadahonda, para no decir nombres, donde llegaban a contratarse hasta 60 y tantos asesores», señala el primer edil majariego. 


MJD Magazin: Varios grupos políticos durante la campaña en Majadahonda incidieron en sus programas y actos públicos que querían reducir el número de asesores, algunos como bandera, concretamente Somos, Ciudadanos e Izquierda Unida. Bien es verdad que PP, PSOE y Centristas no lo hacían, pero al final se han reducido, y eso también lo marcaba la ley ¿Cuál es su posición?
Narciso de Foxá: – Creo que se han producido abusos y que había hay que corregirlos. Yo estoy muy de acuerdo con los asesores, pero hay que decir que los asesores no son asesores. Me explico: un asesor no es alguien sesudo que viene a decirme como lo tengo que hacer o lo que tengo que hacer en Majadahonda. Se llaman así, pero se tendrían que llamar personal de confianza. O de muchas otras maneras, pero no asesores. Para mí un asesor o persona de confianza es mi jefe de gabinete, o la secretaria de cualquier partido político o el jefe de prensa.

¿Por qué?
– Porque tienen que ser personas de absoluta confianza, no pueden ser funcionarios por muchas razones. Primero porque a lo mejor el funcionario es fantástico, pero yo no lo sé, o el político no lo sabe. En el caso de Majadahonda, mi secretaria es funcionaria, pero he tenido una suerte tremenda porque desde el principio fue de mi absoluta confianza. Pero eso no tiene por qué ser así.

Se puede ser funcionario, ser eficaz y tener confianza, al fin y al cabo esos sueldos los pagamos todos…
– En todos los partidos políticos, la secretaria es personal de confianza porque por ella pasan todos los asuntos políticos o todos los asuntos de la alcaldía. O una jefa de prensa. Son gente que trabaja mucho y que no tiene que ver con los asesores, pues están en la brega diaria y trabajando todos los días. Yo creo que eso es necesario, porque además un funcionario por lo general, no se quiere significar. Si yo mañana pongo a un funcionario de secretaria o de jefe de gabinete, se queda marcado para toda la vida. El próximo equipo de gobierno que llegue, si es de un signo político diferente, lo va a marginar, y los funcionarios no quieren eso.

Entonces está de acuerdo con la reducción que marca la «ley Montoro»…
– Yo estoy muy de acuerdo con el personal de confianza, y yo lo llamaría así. Creo que no se puede funcionar en una institución sin personas de confianza que te debes traer. Ahora, también tengo que decir que se ha abusado mucho de este tema. Y hay que decir también que hoy, para el equipo de gobierno, el número de personas de confianza que tenemos es escaso. Pero los tiempos son así. No tenemos mayoría absoluta y lo hemos tenido que consensuar, aunque siempre lo habíamos hecho en el pasado a pesar de disfrutar de esa misma mayoría absoluta.

Fuente:

La jurisprudencia del Tribunal Supremo sobre contratación de personal en los Ayuntamientos: la libre designación y su carácter excepcional

Majadahonda Magazin