La Sacedilla ©María del Sol Piñuela Paredes

LIDIA GARCIA. «Los últimos de Filipinas» fue una gesta, llevada al cine, que narra el final de la guerra de 1898 de España contra EE.UU en la que medio centenar de soldados españoles resistieron durante casi un año en un pequeño pueblo de Luzón (Filipinas), sin saber que el conflicto ya había terminado. Un siglo después, en Majadahonda son «los últimos de la Sacedilla», el barrio situado frente a la Estación de Tren que parece haberse quedado rezagado en la limpieza de nieve y hielo por parte del Ayuntamiento, según describía en las redes sociales este miércoles 20 de enero (2021) la vecina María del Sol Piñuela Paredes en un artículo ilustrado con varios vídeos y titulado: «¿A esto se le llama paciencia? ¿Paciencia quién?» 


Mª del Sol Piñuela Paredes

«¿Cuántas calles de Majadahonda siguen intransitables  o peligrosas? «Tened paciencia, esto no se soluciona de un día para otro.» Pero para limpiar perfectamente el campo de football de La Sacedilla no hace falta la paciencia. Majariegos no se dejen engañar, ni la paciencia ni la gestión del Ayuntamiento van a limpiar sus calles. Por aquí seguimos sin aceras, teniendo que transitar por la carretera y haciendo malabares para podernos desplazar por las calles. Nos pueden pedir paciencia si las prioridades son justas, pero cuando se antepone una instalación deportiva antes que la seguridad de los vecinos, ahí no hay paciencia que valga. Añado que mi critica no va a los trabajadores, los cuales están al pie del cañón haciendo lo que les mandan con los medios que les ofrecen y hacen una gran labor. Mi crítica va hacia el alcalde José Luis Álvarez Ustarroz, el cual se acercó hace unos días y nos pidió PACIENCIA. Vecinos, poned como están vuestras calles, enseñadlas para que se vea nuestra PACIENCIA».

DEBATE CIVICO: ¿DEBEN LOS VECINOS QUEJARSE DE LA GESTION DEL AYUNTAMIENTO SI FALLA O ERA SU DEBER PERSONAL LIMPIAR SUS ACERAS? JANE MOONIE. «Estoy muy, pero que muy harta de leer quejas y más quejas sobre la gestión de acontecimientos para los que no estamos preparados y encima nos pensamos el ombligo del mundo (que si mi calle no está limpia, que si mi ambulatorio no hace, que si mi ayuntamiento tal, que si mi hospital cual, que si mi, que si mi… Es verdad que Majadahonda no es lo que era… ahora somos unos verdaderos ególatras de primera. ¡Lo hemos conseguido! ¡Enhorabuena a todos! Un poquito de motivación, buenas maneras, educación, empatía, solidaridad… Paciencia, etc no nos vendría mal. Somos bastante privilegiados y no nos damos cuenta».

FLOR REGUEIRA REY. «Quejarse de una actuación de la Corporación Municipal es un derecho que nada tiene que ver con el significado de la palabra ególatra. El Ayuntamiento debía tener preparada la sal y también las máquinas porque no fue una sorpresa que fuera a nevar copiosamente, quizá no fue exacta la medida de la capa de nieve: había una previsión oficial de AEMET de 20/30 cm, hecha con una semana de antelación y quizá hubo 40 cm. Pero que la nevada iba a ser importante y larga y que después iban a bajar las temperaturas por debajo de los 0 grados !lo sabían todas las personas que ven informativos, escuchan la radio, leen los periódicos o frecuentan redes sociales!. Los políticos municipales también lo sabían. Su obligación es ocuparse de tener los medios para el bienestar de los ciudadanos. ¡Es su principal función! Y tienen medios económicos y también materiales. Y no lo han hecho bien. Debo de decirlo y decírselo para que no vuelvan a cometer estos errores que a muchas personas nos han teñido aislados sin poder salir de casa (ni a la farmacia, ni al supermercado) para evitar el riesgo de una caída».

«Esto es una realidad que nada tiene que ver con el egocentrismo. Yo también estoy harta de que se critique a toda persona que no esté de acuerdo con la actuación municipal. Tenemos derecho a exponer nuestro punto de vista y a que este sea respetado siempre que se haga con respeto y educación. Por favor, diga lo que opina, argumente sus opiniones, respete las ajenas aunque difieran de las suyas y debata si es lo que ambos desean, pero no atribuya características de personalidad a quien no está de acuerdo con usted, porque técnicamente se está equivocando. Y es natural que a uno le preocupe SU ambulatorio y se solidariza con usted también si tampoco le atienden. Y le preocupe SU calle porque ahí está su casa y comprenderá al de la calle de al lado. Y podrá ser solidario con quien lo necesite. Además, podrá quejarse cuanto desee de la gestión municipal ¡faltaría más! Vivimos en democracia. Un saludo».

Majadahonda Magazin