Narciso se lo pensó mucho pero eran los concejales o él

Narciso de Foxá

La abstención de Ciudadanos (C´s) ha permitido la reelección de Narciso de Foxá (PP) como alcalde de Majadahonda y, hasta los tradicionales 100 primeros días de gestión, solo cabe felicitarle por ello. Es una norma de “fair play” que va arraigando entre nuestros modernos hábitos democráticos. Los majariegos decidieron en las urnas que el Partido Popular perdiera la mayoría absoluta pero permaneciera como el más votado (11). Y que las formaciones más moderadas –C´s (6) y en menor medida Centristas (1)– condicionaran con 7 actas su acción de Gobierno, tanto como las fuerzas más críticas (PSOE (3), Somos (3) e IU (1), que alcanzaron también entre todas 7 concejales. Grosso modo, ese 11-7-7, con variantes internas, es lo que marcará la legislatura. Era lógico que con esa composición en las urnas, la balanza se inclinase hacia donde lo ha hecho.


Narciso de Foxá y Alfonso Reina junto a otros dirigentes de Ciudadanos

Narciso de Foxá y Alfonso Reina junto a otros dirigentes majariegos de Ciudadanos

Los partidarios del cambio reclaman para sí la alternativa, pero la extraordinaria novedad del escenario –Majadahonda llevaba siendo gobernada un cuarto de siglo con mayorías absolutas del PP– ha decantado una salida más prudente: Ciudadanos, que es la verdadera llave del consistorio, facilita la gobernanza y pasa a la oposición con una serie de condiciones públicas y transparentes. Desde ella buscará su espacio propio, recabará información y experiencia, ejercerá el control y formulará propuestas. Y el Partido Popular, que promete propósito de enmienda –a la fuerza ahorcan– se apoyará en esas nuevas convicciones tanto para administrar el presupuesto como para hacer política y dejar en evidencia a la oposición cuando se vea abocado a no poder hacerlo por su situación de minoría.


Manuel Castells

Manuel Castells

Las reglas de juego han cambiado sustancialmente y eso va a requerir sobre todo diálogo, transparencia, negociación y acuerdo. La oposición ha dado un primer paso marcando un hito en el municipalismo español haciendo públicos y transparentes sus debates. El resultado ha sido ejemplar y fija la nueva tendencia, pues no queda otra: si los que se ofrecen como recambio no ponen en práctica medidas para destruir la opacidad y reforzar el control ciudadano (gasto, contrataciones, concesiones, enchufismo, empleos políticos…), el catedrático Manuel Castells ya ha advertido que la volatilidad de sus sufragios es mucho mayor que la de los partidos “tradicionales”. El ejemplo de UPyD e IU es muy elocuente.

Captura de pantalla 2015-06-12 a las 18.53.17También aquí el propio Partido Popular puede tomar la iniciativa: una ciudad próspera, moderna y tecnológica como Majadahonda se hunde en el medievo cuando pervive la prohibición a sus ciudadanos de grabar con audio o imagen los plenos públicos como se permite en el resto de las instituciones del Estado y es habitual en la Europa avanzada. Los debates en las comisiones también son secretos y esto también llena de tinieblas y fundadas sospechas a los electores. Y para más despropósito, la información oficial e institucional del Ayuntamiento se convierte en una máquina de propaganda a través de su página web.

ParlamentoLas retransmisiones televisiva por internet de los actos institucionales –los plenos de Congreso y Senado ya se emiten en vivo desde hace bastante tiempo– no representan complejidad tecnológica alguna, pero en Majadahonda parece imposible de llevar a cabo. Un dato puede resultar significativo: uno de los proveedores de estos servicios (el informático Alejandro de Pedro) tuvo que ingresar en la cárcel y está en libertad bajo fianza. Se une a la lista demasiado larga de los licitadores municipales que han concluido su carrera empresarial entre rejas o con graves imputaciones que se dirimirán en próximos juicios. Corresponde al nuevo equipo de Gobierno de la Corporación disipar estas dudas y acreditar un nuevo estilo de gestión y hacer política. Posee la legitimidad de las urnas y de sus representantes, tiene la experiencia y conoce perfectamente los errores cometidos. Del tino y habilidad en su resolución dependerá su éxito y remontada o su progresivo hundimiento.

Majadahonda Magazin