JULIA BACHILLER. Primer pleno del año 2018 que contó con la presencia de un gran número de vecinos, asistencia que motivó incluso que el alcalde solicitara reducir las intervenciones de los concejales para no alargar la sesión y que los vecinos pudieran intervenir en el turno de ruegos y preguntas al final del mismo. La dramática intervención de los padres y madres de los colegios El Tejar y Federico García Lorca dejó varias sensaciones en el pleno que no pasaron desapercibidas. En primer lugar la escasa confianza que suscita la Plataforma en Defensa de la Educación Pública, excesivamente politizada, que no admite al PP e incluso expulsó a Mariene Moreno (Cs) de su pertenencia a la misma por alejarse de la ortodoxia ideológica. José Antonio Méndez (El Tejar) lo dejó claro: «Somos 200 familias y nos repele ver como se utiliza la Educación como argumento político y desgaste de las ideologías. Queremos la libertad para elegir la educación de nuestros hijos y que aprendan contentos y felices sin tener que preocuparnos por su seguridad. Queremos unos Presupuestos para Educación aprobados por todos, no paralizados. Y queremos que los concejales vengan al Colegio: no les recibiremos de uñas ni utilizaremos nuestra mala situación como «casus belli» político. La Educación debe ser terreno neutral para las familias de Majadahonda».


Llegado el momento, sorprendentemente, de todos los presentes, solo solicitaron su intervención tres personas. El primero de ellos José Antonio Méndez, padre de un alumno del Colegio El Tejar y representante del AMPA, quien hizo mención al deterioro de las instalaciones, lo que el mismo definió como “problemas de mantenimiento” que suponen un peligro y riesgo para sus hijos diariamente. A continuación mencionó algunos de ellos: una grieta de grandes dimensiones entre el patio de infantil de infantil y primaria, goteras en las aulas que caen sobre enchufes donde los alumnos tienen los ordenadores, problemas de sanidad en la cocina, la carencia de una zona techada en el patio donde resguardarse los niños, el desprendimiento de una teja, lo cual no ha supuesto la revisión del estado de las demás.

Todo lo expuesto lo acompañó de una amplia explicación de los daños que pudieran provocar y que incluso ocasionan ya a los alumnos. Y añadió: “yo comprendo que todos tengamos nuestras listas de prioridades y de urgencias en la cabeza. Pero en todo eso hay algo que es realmente urgente y realmente importante, y creo que la seguridad elemental en los colegios”. Finalizó su petición solicitando el compromiso de una solución a los problemas expuestos para poderla transmitir a los padres de los alumnos, así como elaborar unos presupuestos de actuación urgente para los problemas de mantenimiento. E invitó a toda la corporación municipal a visitar el centro: “queremos que esto se solucione, vengan ustedes. Este problema como padres lo ponemos en sus manos”. Y continuó: «les enseñaremos las cosas que los padres hemos pagado para ir adecentando el colegio: muros, pintura, ventiladores… Tenemos nuestros trabajos pero estamos hoy aquí por nuestros hijos y ustedes están aquí también por nuestros hijos, entre otras muchas cosas, pero por favor no dejen de hacer el suyo, que tiene que ver con los centros públicos que son de todos, que tienen que ser para las familias de Majadahonda y que estamos realmente preocupados por la seguridad de nuestros hijos”.

La intervención provocó aplausos por parte de los presentes y la intervención por parte del alcalde, ya que el reglamento prohibe expresamente actos de apoyo o reprobación a las intervenciones, aunque también le dio la enhorabuena por la exposición realizada. En pocas ocasiones se ha escuchado en el pleno una exposición, una explicación y la solicitud de una solución como la realizada por este representante de los padres de los alumnos de El Tejar, que sin leer en papel alguno y con apenas ayuda de un guión, transmitió de una manera clara, educada y con criterio la situación de las instalaciones de dicho centro escolar. El alcalde cedió la explicación a lo expuesto al concejal de Urbanismo Ricardo Riquelme, quien tras agradecer la exposición realizada y confesar que él y su hermano eran ex alumnos del centro, comenzó refiriéndose a la grieta del muro, alegando que según un informe de los técnicos municipales era debida «a un corrimiento de tierras y no existe riesgo», por lo que le solicitó al padre que le aportara el informe que el colegio posee de la situación en que se encuentra la grieta para hacérselo llegar a los funcionarios que han valorado y decidido que todo está bien.

Con respecto a las tejas, Riquelme afirmó que eso está «solucionado» y sobre las goteras garantizó que «a principios de febrero» se procederá a su reparación puesto que antes no era posible el acceso al tejado por parte de los funcionarios operarios. Y añadió que a partir de mayo hay un presupuesto destinado a reparaciones en todos los colegios cuyo importe no se mencionó pero que está en proceso de adjudicación.  Aceptó la invitación para acudir al centro para ver tanto lo positivo como lo negativo de lo que allí sucede. Además se comprometió a actuar con la máxima celeridad dentro de los plazos legales establecidos y dando prioridad a las obras en los colegios. La siguiente intervención fue realizada por María Grana, vocal del AMPA del Colegio Federico García Lorca, que también estuvo presente para exponer las mejoras y reformas necesarias en este centro, lamentando «no ser tan diplomática» y responsabilizando «a toda la corporación municipal» por no haber hecho «un correcto mantenimiento» de las instalaciones. Y cuando se hizo, como en el caso del tobogán de infantil, la chapuza de las obras lo dejó inutilizado: «se lo cargaron en unos días».

Y añadió: «¡Son todo promesas y los directores de los colegios están desesperados!». Fueron cuatro folios en los que mencionó las actuaciones necesarias y de las que destacó el cambio de puertas, reparación de grietas, patio, desperfectos en paredes, sustitución de baños, tuberías oxidadas, árboles que se caen… Solicitó nuevamente la inversión en reformas, ya no solo en este centro sino en todos los de Majadahonda, motivada por los más de 30 años que llevan construidos y la urgente atención, «no por estética sino por seguridad». “No veo la preocupación por la seguridad de nuestros hijos, no la veo”, dijo la madre, que añadió que “hoy me he quedado estupefacta con las cifras de 100.000 € que todos los años reciben las instalaciones del Rayo Majadahonda, que me parece muy bien, mientras que la del colegio recibe 6.000 al año para mantenimiento y los de línea 1 solo 5.000. Pido un poquito de seriedad y compromiso, pero compromiso con todos”.

Como respuesta, el alcalde tras solicitar la aportación de los informes de los representantes de los dos centros escolares y reconocer que los periodos de contratación administrativa del Ayuntamiento están siendo «extremadamente largos», finalizó diciendo: “Vamos a ponerles solución, que es de lo que se trata”. La última intervención fue realizada por otro padre de El Tejar en apoyo a lo ya mencionado y aportando alguna matización de lo ya expuesto. Los tres padres aportaron además en sus intervenciones nombres propios de los responsables de la situación: concejales de Urbanismo y Educación, alcalde, Oposición y director de Educación, Vicente Colilla. Y una sorpresa: en la prensa no teníamos constancia de las quejas de las AMPAS ni llegó tampoco a la redacción la gravedad del asunto con un contacto directo, con la insistencia requerida o con la documentación necesaria. ¿Falló también por parte de los padres y madres la Comunicación?

Majadahonda Magazin