JULIA BACHILLER. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha participado este jueves 24 de marzo en la entrega de los Premios APM de Periodismo 2022 otorgados por la Asociación de la Prensa de Madrid, donde ha recordado que el periodismo es un “pilar del sistema democrático” y que “no hay auténtica libertad sin prensa libre”. Por eso indicó: «uno de los deberes principales de la prensa es ser contrapoder, el cuarto poder… La crisis o el florecimiento de la democracia va parejo a los de la prensa. La del periodista no es una profesión cualquiera, es un pilar del sistema democrático, no hay auténtica libertad sin prensa libre. Por eso es importante recordar que no se concibe una democracia sin periódicos y por eso una de las primeras víctimas de los regímenes totalitarios es siempre la libertad de prensa, lo estamos viendo en Rusia durante este mes. En España, tanto la jurisprudencia como el propio consenso social reconocen el derecho a la información como un pilar básico de nuestra vida en común, un derecho consagrado por el artículo 20 de la Constitución, un derecho que invocamos y reivindicamos hoy aquí». Y en este punto, ha destacado el papel de «los profesionales valientes que no se someten a la tiranía” en Rusia, en el marco de la invasión de Ucrania, y ha subrayado “grandes ejemplos de coraje” como el de la periodista que irrumpió en un informativo con un cartel contra el conflicto bélico o el de Novaya Gazeta, el último medio ruso independiente que resiste “pese a las presiones y a las amenazas».

Los premiados en esta edición de la APM han sido Lucía Franco, Diego Casado, los servicios informativos de Radio Televisión Canaria y José María Pérez González, «Peridis». En su discurso, la presidenta madrileña pidió “reconocer el talento y el esfuerzo es lo que se ha hecho aquí hoy con estos premios” y seguidamente felicitó a los premiados. De José María Pérez González “Peridis” dijo: “por todo lo que ha hecho durante su carrera, y por eso recibe este premio de honor de este año. Todos los políticos hemos sido víctimas de su agudo pincel. Yo hasta como “ojerosa” presidenta de la Comunidad, vestida con una bandera un tanto viperina en algunas ocasiones, pero que poco a poco empiezo a ser un poquito más grande».

Ayuso abundó en que «no podemos darnos por satisfechos con el puesto 29 que ocupa España en la clasificación de la libertad de prensa internacional, según «Reporteros sin Fronteras«, ni tampoco es una buena noticia el reciente informe del Departamento de Estado de EEUU cuando denuncian a nuestro país menoscabando la libertad de prensa señalando a determinados medios de comunicación y a periodistas concretos”, ha añadido la presidenta, para completar que no se pueden aceptar “por sistema ruedas de prensa sin preguntas o comparecencias convertidas en homilías. En España también hay muchos periodistas que han tenido que llevar escolta para no seguir el camino de José Luis López de Lacalle, y es que la libertad no es como el sol que aparece cada mañana sin necesidad de que nada ni nadie intervenga. La libertad hay que ejercerla, y se conquista, y se reserva cada día, porque tiene enemigos. También quiero recordar a todos los periodistas, los cámaras, los fotógrafos, a todos los profesionales del periodismo y de la comunicación que han puesto en riesgo su vida para contarnos desde dentro el día a día de las distintas guerras, como ocurre hoy en la invasión en Ucrania. Sin su compromiso, sin su valentía, viviríamos completamente al margen de la verdad», señaló Ayuso.

Y concluyó: «Vivimos tiempos convulsos, estamos rodeados de incertidumbres y el periodismo no puede ser parte del problema, porque no lo es, sino parte de la solución, porque es así. Por eso, frente al ruido, el periodismo no puede ser equidistante, tiene que ser honesto, ha de buscar la verdad, atreverse a contarla, y hacerlo bien. En definitiva, hoy más que nunca, el periodismo debe aspirar al rigor, como hace la inmensa mayoría de sus profesionales. Rigor en la comprobación de los hechos, en la forma de darlos a conocer, rigor en las conclusiones. Ese rigor que Pulitzer, prácticamente todos los estudiantes de periodismo lo hemos estudiado, definió sencillamente como la vocación por lo correcto. Gracias, a todos los profesionales de la información que han decidido dedicar su vida a ello y enhorabuena a los premiados».