TONY DEL VALLE. «El Rayo Majadahonda se descarga la APP “Iriondo Boys” y encaja a la perfección en el Municipal de Fuenlabrada Fernando Torres (0-2)», sería mi titular. Porque si teníamos dudas del equipo, este sábado han quedado disipadas con un centro de campo comandado por Enzo y Fede Varela, el nuevo Paulo DyBala del Rayo. Ambos se bastaron para desnudar a un Fuenlabrada muy inferior al que vimos la temporada pasada. Y tanto esplendor lo justifica un análisis por líneas: hay mucho que mejorar en la defensa de tres formada por Galán, Héctor Verdés y Morillas, suponemos que con el tiempo irán cogiendo confianza y sitio en el campo. Los dos falsos laterales Isaac Carcelén (Iza) y el otro Varela cumplieron sobradamente, convirtiéndose Isaac en el autor de los dos preciosos goles que sirvieron para que los majariegos se alzaran con la victoria. Delante de la defensa estuvieron Luso y Oscar, que cumplieron holgadamente su cometido de primer muro de contención majariego y ataque. Como siempre, solo ante el peligro, “Morenito de Perú” Jeisson trajo de cabeza al “Cata” Díaz, con su brega continua entre líneas de la defensa fuenlabreña. Visto lo visto en el Fernando Torres de Fuenlabrada, podemos iniciar LaLiga1,2,3 con optimismo, valentía, seriedad y sobre todo con calidad y amor al buen juego que seguro desarrollará el Rayo Majadahonda. Espero que se convierta en el equipo revelación del fútbol profesional por el trato que se le da al balón. Muchos serán los aficionados que disfrutarán de ver jugar al Rayo Majadahonda y seguro que de jugar así en más de un campo de España saldrán ovacionados por la afición contraria. Si no, tiempo al tiempo.


J. Federico Mtnez y Tony del Valle en Fuenlabrada

J. FEDERICO MTNEZ. Mucho y bueno lo visto en el Fernando Torres de Fuenlabrada, con una primera parte más tediosa donde el juego lo puso el Rayo Majadahonda y el equipo local solo ofreció la contundencia del Cata Díaz en defensa y la inútil brega de Randy, más solo que la una. La pérdida de Fran Garcia en el lateral (lo veremos en 2ª A con el Albacete) y la marcha del goleador Dioni a la primera división de Polonia (Lech Poznan) para medirse con nuestro Jorge Félix (Piast Gliwice) han dejado aún más diezmado a este equipo que se paseó por la Segunda B con la batuta de Luis Milla. Mucho tendrá que mejorar para aspirar a la zona alta de la tabla porque este sábado el Rayo Majadahonda lo jibarizó hasta extremos insospechados por su afición, que abandonó el estadio bastantes minutos antes de la finalización del encuentro, harta ya de ver a los locales perseguir sombras (la posesión pudo ser fácilmente 25/75 a favor de los visitantes). Y hubo momentos en los que incluso aplaudió el juego del Rayo Majadahonda, en una actitud tan generosa como digna de un público entendido y caballeroso.

Tras el mal diseño majariego del inicio de pretemporada, con tres primeros partidos contra dos equipos demasiado potentes como aperitivo (Rayo Vallecano, Leganés (primeras) y solo el Albacete de nuestra liga), el equipo de Iriondo naufragó en Alcalá con una victoria pírrica a los penaltys extras frente a un tercera división que se le subió a las barbas de Don Quijote o Cervantes, que tanto monta o monta tanto. Por eso el maestro de los banquillos se tomó el examen de Fuenlabrada como una reválida a cátedra, sabedor de que la afición y la prensa ya empezaban a rumiar con la mosca tras la oreja. Y frente a un a priori nada fácil envite sacó una vez más sobresaliente. Iriondo dispuso un equipo muy joven pero con veteranía defensiva para que aguantara 90 minutos en el campo como en un partido oficial. Y vaya si respondió.

La portería sigue sin estar clara, pues ni Basilio ni Cantero tuvieron trabajo. Lo estupendo es que hay que elegir entre lo bueno y lo mejor. No es preocupante, salvo para Iriondo, pero uno de los dos tendrá que jugar la Copa y ser reserva, difícil elección. La defensa es veterana y nueva, pero más rápida que la del año pasado: Rubén, Andújar, Jorge García y Juan Cruz ahora se llaman Isaac Carcelén (Iza), Galán (32), Héctor Verdés (34) y Morillas (31), con Luso (33) ejerciendo de Vicente. Y estos señores, porque a esa edad hay que tratarlos de usted, saben jugar al fútbol, eso no cabe duda, después de verlos rendir a tope en el Fernando Torres.

Pero si la defensa fue segura y contundente por alto y por bajo, además de tener buen pie,  lo mejor fue sin duda el medio campo: Enzo Zidane se ha creído que es la estrella que todos los medios pregonan y con los minutos y confianza que le da Iriondo ha empezado a labrar el camino para demostrarlo. Este sábado dio un recital de pases al pie y al espacio, toques y filigranas que hasta despertó un sonoro suspiro unánime de asombro en la grada. Tanto se gusta el chico que quizás se sobró un poco y abusó de balón en una jugada que pudo suponer el 0-3 y que perdió por no pasarla, pero no cabe duda de que cuando se recupere de sus molestias Carlitos lo va a tener difícil con este director de orquesta al que le cantaron hasta la Marsellesa en los graderíos. Y aunque Iriondo ha alineado alguna vez a los dos juntos lo cierto es que hay garantías con ambos, individualmente o por separado.

Pero hay otro espectáculo más en la medular. Se llama Fede Varela y aunque hay otro Varela en el equipo este quiere nombre, apellido y tratamiento de excelencia. Lo que hace este chaval de 21 años sobre el campo dice Tony del Valle que se parece a lo que hace Dybala en la Juve porque es el futbolista al que más se le parece. Defiende, ataca, regatea, dispara fuera del área, lleva el balón cosido al pie, busca la mejor opción de pase, no es egoísta, mejora siempre las jugadas y los balones en ataque. Este sábado también levantó suspiros de admiración en Fuenlabrada y no es para menos: ha nacido una estrella.

Y el tercer MVP: Isaac Carcelén «Iza». Otro gaditano en el equipo tras el buen sabor de boca que dejaron Ñoño y Carlitos, pero muy distinto. Tiene carácter y gol, pues conseguir un doblete jugando como lateral pegado a banda no es fácil ni habitual. No se entiende como la afición de la Cultural Leonesa le puso la cruz a este futbolista que fue inmortalizado echándose mano a los balones y chupándose el dedo en la boca cuando marcó el año pasado ante el Valladolid. Sus celebraciones son ahora menos elocuentes pero tanto él como el otro Varela, pero sobre todo él, se hicieron dueños y señores de las bandas de ataque.

El medio campo se configura así, por lo visto en Fuenlabrada, como lo mejor del equipo. Y a decir de los entendidos, si la media funciona el reloj da las campanadas. Oscar estuvo también de cine e hizo olvidar a Ayoub y a Fabry, que son las 2 referencias más inmediatas que tiene el equipo en esa posición. Y decir eso es decir mucho. Aunque a muchos gusta el «stopper» clásico de envergadura y tosquedad que Mourinho tanto aprecia, habrá que recordar que según la estadística los dos mayores recuperadores de la liga española en los últimos años han sido Iniesta y Modric. Cada jugador tiene su estilo y Oscar está ahí por méritos propios, conjugando elegancia, sacrificio y eficacia.

Y un apunte más: el ex juvenil Escobar jugó medio tiempo y no desentonó lo más mínimo, es alucinante comprobar como el chico no se amilana, toma responsabilidades y no desentona junto a estos dos astros que son Enzo (Zidane) y Fede (Varela), pues su estilo es parecido. La duda es terrible: con minutos será una estrella y con fogonazos como el de Fuenlabrada despunta. ¿2ª A intermitente o Tres Cantos fijo y con galones pero en Tercera? Lo que sea, pero esta plantilla ya no puede permitirse el lujo de tenerlo 1 año entrenando sin jugar porque lo desgracian.

La delantera, a mi juicio, fue lo más flojito. Jeisson no tuvo el día y el «Cata» sacaba la catana una y otra vez, no perdiendo ni un solo balón en disputa. A Ruibal y Echu no se les vio apenas los escasos minutos que jugaron y el juvenil africano Ryan solo se hinchó a correr. Claro que según la doctrina Iriondo, los goles los marca el equipo, no los delanteros, y el míster gusta como en la lotería de repartir entre todos la pedrea más que adjudicar el gordo. «Este Rayo se parece al Barcelona», exclamaban los fuenlabreños en la grada después de una jugada en la que el equipo dio 50 pases seguidos y retuvo el balón durante 5 largos minutos que a los locales se les hicieron eternos. Y esto mismo lo repitieron no una sino en varias ocasiones. Así que, por lo visto en Fuenlabrada y a la espera de rivales más fuertes que se parezcan algo más a Zaragoza, Mallorca, Nastic, Lugo y Granada, que son los 5 primeros envites de liga, este Rayo Majadahonda supera el mal arranque, recupera sus orígenes que tantas alegrías dio y ahora asombra y promete. Ojalá que no haga bueno ese viejo aforismo español que dice que una golondrina no hace primavera porque en el Fernando Torres se vieron acrobacias y malabarismos no dignos de un Segunda sino de Primera.

Majadahonda Magazin