Tomi Prieto y Nacho Heras. Foto Angel Gutierrez.

Tomi Prieto y Nacho Heras. Foto Angel Gutierrez.

Y le faltaron 5 minutos para ganar. El Rayo Majadahonda acarició la victoria en el estreno adelantado de la División de Honor, la competición juvenil de mayor nivel del fútbol español y antesala de las selecciones sub 18 y sub 19. Y lo hizo entrando por la puerta grande, en un espectacular, disputado y entretenido partido que fue ganando hasta el minuto 85 pero que resistió también 9 minutos finales (con 4 interminables de descuento) en el que el equipo rojiblanco asedió la meta del majariego Chema. Con lleno en el Cerro del Espino y la plana mayor de fútbol madrileño como espectadora, los juveniles majariegos dominaron el balón, la posesión, la defensa y el ataque en el primer tiempo y se fueron al descanso con 1-0.


Ruben y Jose. Foto Angel Gutiérrez.

Rubén y el lateral rayista Jose. Foto Angel Gutiérrez.

El certero gol de Jorge, aprovechando una presión imposible al filo del pitido arbitral, ponía justicia a esa primera mitad donde los pupilos de Miguel Cerdán salieron muy ordenados, movieron el balón de un lado a lado del campo hasta descafeinar la presión colchonera por cansancio y hastío, lanzándose con desparpajo al ataque. Era imposible robarle la bola a la zaga y el centro del rectángulo hacía una labor de sacrificio y enganche descomunal con jugadas trianguladas que coreaba el público. Así, los delanteros atléticos llegaron al final de los 45 minutos extenuados. Y su defensa y el medio campo muy exigidos.


Nacho Heras, Beni y Jose. Foto Angel Gutiérrez.

Nacho Heras, taponado por los defensas rayistas Beni y Jose. Foto Angel Gutiérrez.

En la segunda mitad, sin embargo, cambiarían las tornas. El At. Madrid apretó los dientes pero ya tenía doble rival: el Rayo Majadahonda y el reloj. Comenzaron los cambios donde ambos entrenadores trataban de reforzar sus virtudes y minimizar sus defectos, y aunque los colchoneros de Oscar Fernández llevaban la batuta, la defensa majariega se mostraba sólida, el centro del campo seguía el mismo compás y la delantera inquietaba. Hasta tal punto resistió el Rayo Majadahonda que, al contra ataque, estrelló un balón en la cepa del poste y otro esférico se paseó insultante por la raya de gol sin que nadie acertara a introducirlo. No logró ese segundo gol que hubiera sentenciado el encuentro y provocado el delirio en la grada. Y la sombra del partido del domingo pasado donde el primer equipo de Segunda B perdió el encuentro con el Real Madrid-Castilla tras ir ganando 1-0 hasta el minuto 80, recorrió los graderíos como un escalofrío.

Altamirano y el delantero Fredy. Foto Angel Gutierrez.

Altamirano y el delantero majariego Fredy. Foto Angel Gutiérrez.

Y es que el At. Madrid no desfallecía, sabía sufrir y atacaba sin desmayo una y otra vez. Dicen los que entienden de este deporte que a los equipos grandes hay que cogerlos al inicio de la liga pero lo cierto es que fruto de esa tenacidad atlética, en el citado minuto 85, Toni Moya se deshacía de cuantos rivales salían a su paso y lograba perforar por fin la meta de Chema, hasta ese momento intratable con las manos y con los pies. Así se llegó al pitido final con un resultado justo, pero con cierta sensación descorazonadora entre los rayistas, que tocaron con la punta de los dedos un resultado que pudo ser histórico. Y es que el At. Madrid, contra pronóstico, hizo grande al Majadahonda.

Juveniles del B majariego que entrena Yoni Alba

Juveniles del B majariego que entrena Yoni Alba

Casi tan buen ambiente como en el campo, con una pugna fuerte y noble, de alta calidad e intensidad, la grada registraba una enorme animación. Más ruidosa la rayista, que al fin y al cabo jugaba de local por las obras de cambio de césped en La Oliva, pero nada silenciosa tampoco la colchonera, quizás más expectante por su condición de teórica favorita. Así, se vio por la tribuna a numerosos jugadores, entrenadores, representantes y ojeadores, entre ellos el director deportivo del At. Madrid, José Luis Pérez Caminero, el ex jugador y ahora comentarista Kiko Narváez, las chicas del At. Féminas, que entrenaban en el campo aledaño, Andrea Berta, director técnico y los directores de la Academia, Emilio Gutiérrez Boullosa, Carlos Aguilera
y Miguel Ángel Ruiz.

Iriondo se sentó en la grada

Iriondo se sentó en la grada

Por parte del Rayo Majadahonda también se vieron por la grada a los entrenadores Antonio Iriondo (2ªB), Jonatan Alba (Juvenil B) y el coordinador de la cantera majariega, Manu Alcázar. También dirigentes como el presidente rayista Enrique Vedia, el secretario técnico José Luis Hernández, el vicepresidente Ignacio Acha, y los directivos Enrique, Jesús Méndez y Ramón Arilla. También a numerosos jugadores del Juvenil B del Rayo Majadahonda: Ventura, Mata, Tala, Pedrero, Adrián, el recién incorporado Oscar Morillas y el ex jugador Zapata. En definitiva, una gran tarde de fútbol y un inesperado resultado que rompe todas las “quinielas” y sitúan al Rayo Majadahonda con muy buenas sensaciones de cara al arranque de la liga.

Oscar Fdez y Miguel Cerdán: duelo de entrenadores

Oscar Fdez y Miguel Cerdán: duelo de entrenadores en los banquillos

COAIpqUWIAAnWVsRayo Majadahonda: Chema, José, Beni, Tomás, Mario; Juan Carlos, Villa, Javi, Fredy, Adán y Jorge. En la segunda parte Jacobo, Héctor y Acho. En el banquillo estuvieron el portero Alvaro y José Barquín. Y en la grada –Miguel Cerdán convocó a toda la plantilla, como en las grandes ocasiones– estaban el extremo Hoyos, el central Alex Castillo “Cadete” y el delantero Alex. Incluso el zaguero Raúl León, aún lesionado, asistió como espectador.

Reportaje gráfico del encuentro:

Majadahonda Magazin