Un aficionado del Rayo Majadahonda aplaude al equipo ante un lesionado Iturraspe que vio el partido desde la grada

J. FEDERICO MTNEZ. «No se ganó Zamora en una hora», dice el viejo aforismo español que reprodujera La Celestina y llegó hasta Cervantes. Se acuñó a propósito del largo sitio que sufrió la ciudad castellana durante 7 meses por parte de Sancho el Bravo para arrebatársela a su hermana doña Urraca. Y en este caso se necesitó también la consabida hora, ya que el Rayo Majadahonda solo lograba doblegar a la escuadra zamorana a la hora y 5 minutos (2-1) pero necesitaba consolidar el resultado posterior (3-2) «parando» el partido a falta de 10 minutos, pues incluso con 10 el Zamora turbaba con sus ataques y corners. Lo cierto es que fue una noche mágica la vivida este sábado 21 de mayo (2022) en el Cerro del Espino con este trepidante partido entre el Rayo Majadahonda y el Zamora, que terminó con apurada victoria rayista (3-2) con triplete de Héctor pero que pasó de la euforia al temor del empate a causa de ese constante tobogán de emociones.


J. Federico Mtnez

La tercera victoria rayista del «póker» que necesita para entrar en play off de ascenso a Segunda A -y que debe consumarse el próximo sábado en Extremadura ante un Badajoz que perdió en Logroño y ya no se juega nada, lo cual es un arma de doble filo- se cimentó sobre todo en la eficacia goleadora. Fueron su base dos certeros y bellos cabezazos del ariete majariego Héctor, ídolo de la afición más pequeña, y los cambios que Abel Gómez introdujo, sobre todo con la entrada de Mawi, que revolucionó el ataque, forzando incluso un penalty que sirvió para el 3-1. El Zamora no obstante supo contrarrestar estas arremetidas y 10 minutos después puso un 3-2 que dejó los últimos compases del encuentro en intriga y suspense, a veces al borde del infarto. Llega así el Rayo Majadahonda al último y decisivo partido en el Nuevo Vivero consolidando su cambio de tendencia y racha, con toda la ilusión de alcanzar un sueño que esta temporada ha costado sangre, sudor y lágrimas y que, de conseguirse, dejaría al club a solo dos partidos de alcanzar la Segunda A en esa otra segunda fase a disputar en Galicia.


La afición puso el «plus» que reclamaba el equipo y que necesitará también en Badajoz

La victoria en tierras extremeñas le daría pasaporte al Finisterre, donde se disputarán las finales en esta extraña «fase final» que obliga a desplazarse a las aficiones en lugar del más lógico doble partido que traería más expectación, interés y taquilla. Cosas de Rubiales aparte -se lleva por contrato un 0,15% de lo que la RFEF ingresa y a saber que obtiene con este extraño formato- el objetivo del club esta temporada parece acariciarse: el primer equipo de Abel Gómez está a 1 partido del play off y el segundo equipo de Manu Alcázar llegó a la final madrileña quedándose a un gol de conseguir llegar a la siguiente fase. Y así las cosas, todo queda pendiente de esa finalísima de Badajoz que en principio se disputa el sábado 28 de mayo a las 20:30 horas. Rayo Majadahonda: Champagne (2), Borja González (3), Cristian Pérez (3), Jorge Casado (3), Ángel Bastos (3), Jesús Bernal (3), Juanjo Sánchez (3) (Tropi, min. 83 (2), Nando García (3) (Manny Alexander, min. 76 (2), Javi Gómez (2) (Mawi, min. 63 (3), Héctor Hernández (3) (Rubén Sánchez, min. 76 (2), Néstor Albiach (3) (Mario García, min. 83 (2). MVPs: Héctor y Mawi. Las más espectaculares fotos y vídeos de la afición en el último partido en casa pinchando aquí.

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