La historia de las agresiones juveniles en Majadahonda que han tenido su origen en delincuentes que se jactaban de su ideología nazi arroja un triste balance: dos muertos, un mendigo quemado vivo y numerosas agresiones. En 1992 murió el inmigrante marroquí Hassan Al Yahami, de 25 años, en la confluencia de las calles Las Norias y Gran Vía. La policía detuvo a cuatro cabezas rapadas como presuntos autores del crimen del marroquí : Pablo López Peña, de 19 años, apodado El Remos, José Antonio Blanco M., de 19 años, conocido como El Jamones; Daniel San José S., de 20 años, experto en full-contact; y Rubén T. C., de 17 años, conocido como El Bull. Todos reconocideron su participación en los hechos.
En enero de 1997, medio millar de jóvenes de Majadahonda alzaron su voz contra «las agresiones fascistas» que se producían en la localidad durante los últimos meses. «Diciembre ha sido el peor mes porque se han llegado a producir siete agresiones de estos grupos violentos organizados en un solo día, aunque habitualmente los fines de semana se registran unas cinco palizas de estos nazis«, explicaba Carmen Álvarez, portavoz de la Plataforma contra la Violencia, convocante de la concentración.
Fue un aviso y nadie les hizo caso. Cinco meses después, el 27 de junio de 1997, el estudiante majariego Fernando Bertolá moría asesinado en Majadahonda de una puñalada en el corazón. Este joven de 21 años, que cursaba Derecho, fue agredido por Antonio de Lucas Andreu, alias el Mechina, que había sido detenido en 7 ocasiones y en cuatro se le retiraron armas blancas. Fue condenado a 21 años de cárcel mientras Faustino L. M. y Óscar S. S., amigos de El Mechina, quedaron absueltos del delito de omisión de socorro. El Ayuntamiento decidió ponerle el nombre a la víctima en una calle del centro, pero las obras de remodelación de la zona acabaron con la vía y con su memoria.
Fruto del revuelo producido, durante algo más de una década los jovenes neonazis se ausentaron de la localidad hasta que en 2009, en plena celebración de las fiestas de Majadahonda, otro grupo de neonazis, “no encontró mejor diversión que apuñalar por la espalda a todo aquél que no le gustara «por sus pintas». Tres jóvenes resultaron heridos leves, según confirmaba la Guardia Civil. “El chaval estaba disfrutando de las fiestas cuando se le acercó un nazi por detrás, le rajó y se fue riéndose”, contaba a 20minutos.es un amigo de uno de los agredidos, de 16 años.
Al principio, el joven no se dio cuenta de que había sido apuñalado, pero un rato después de la agresión «empezó a encontrarse muy mal». Le dolía la nuca y tenía mucho calor. Sus amigos le quitaron la ropa y vieron «una gran mancha de sangre». La hoja del arma le atravesó 4 cm y estuvo a punto de tocarle el riñón. La Guardia Civil buscó a dos o tres jóvenes que iban juntos, al menos uno de ellos menor, pero negó que los autores fueran neonazis.
En 2012 la Guardia Civil de Madrid detuvo a 17 jóvenes pertenecientes a una banda de «skinheads», uno de ellos menor de edad, por agredir a un mendigo en Majadahonda, al que quemaron vivo, y a otras dos personas hace unos días, según informaba la entonces delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes. Los detenidos intentaron quemar al indigente y después huyeron. «Estos jóvenes pertenecían, efectivamente, a ‘skinheads’, ultraderecha», dijo Cifuentes, que aseguró que se trataba de «un hecho aislado”: «Los jóvenes no constituían una banda pero sí que actuaban de manera coordinada»
En 2013 el Grupo de Información de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid detuvo a este grupo de neonazis “acusado de dar una gran paliza a varios jóvenes de ideología contraria el pasado agosto en Majadahonda”, señalaba el diario ABC. “La investigación arrancó cuando los agentes se percataron de que las víctimas presentaban una marcada estética «sharp» (ultraizquierdista), lo que les llevó a pensar en que se trataba de una agresión con trasfondo ideológico. El Puesto de Majadahonda fue el primero en señalar la identidad de los sospechosos, que conformaban un grupo de siete neonazis. Le pasó los datos al Grupo de Información, que averiguó que el cabecilla de este grupo ya estaba relacionado con la agresión al mendigo de Majadahonda que fue arrojado a una hoguera.
”El líder de la cédula nazi había estado en prisión por estos hechos, pero al salir en libertad retomó sus «cacerías», que es como se conoce en el argot las agresiones de skin heads. Este grupo ahora desarticulado, según se ha podido determinar por las investigaciones realizadas, tenía una cierta actividad en foros y redes sociales de internet, donde hacían apología de su ideología nacional socialista-nacional revolucionaria (nazi)”, concluía ABC. Y “El diario.es” apostillaba: “Los detenidos tienen entre 19 y 23 años y presuntamente habrían participado en dos agresiones cometidas los días 2 y 4 de agosto, una a las puertas de un local de copas de Majadahonda y la otra frente a una tienda de 24 horas.
En los últimos meses de 2013 Majadahonda había experimentado un repunte de actos violentos atribuidos a grupos neonazis que incluían una reyerta con arma blanca y al menos otra agresión más. Uno de los últimos altercados consistió en una pelea entre neonazis y otro grupo de jóvenes con estética antifascista. Una de las peleas empezó simplemente por llevar una camiseta del grupo musical ‘Soziedad Alkohólika’.
