Torete

«Esta semana saltaron las alarmas en las redes sociales con la noticia que Torete, pedanía de Corduente, había sufrido un terremoto. La realidad es que la localidad dispone de un sismógrafo de banda ancha, con un digitalizador de tres canales (24 bits), que recoge los movimientos producidos en la tierra. La estación forma parte de la Red de Alerta Sísmica del Instituto Geográfico Nacional». La redacción del periodico Nueva Alcarria desvela que el tímido terremoto sufrido en la localidad de Torete (Guadalajara) fue una falsa alarma y que no se produjo ningún seísmo como consecuencia del temblor registrado en Majadahonda. Y concluye: «La noticia que saltó a los medios de comunicación a través de Europa Press dice que «un terremoto de dos grados en Majadahonda se deja notar en Torete» pero lo ocurrido es que el sismógrafo detectó ese temblor pero en ningún momento despertó ni asustó a los habitantes de la población. Según palabras del alcalde pedaneo de Torete, Germán Martínez «en ningún momento hemos notado nada durante la noche«.


Lo cierto es que las consecuencias del seísmo que se produjo en Majadahonda también pasaron inadvertidas para los vecinos de la ciudad e incluso la noticia de este suceso quedó eclipsada por las consecuencias del temporal de nieve. La estación medidora ubicada en el Valle de los Caídos fue la encargada de detectar este movimiento de tierras de 2º grados en la escala de Richter en el término municipal de Majadahonda que se produjo a las 3.21 de la madrugada, junto al arroyo de la Sacedilla, en la zona de El Plantío, en un área natural. El jefe de servicio de Instituto Geográfico Nacional, José Benito Bravo, explicó que se había tratado de un “pequeño” terremoto que debido a su intensidad únicamente “podría” haberse sentido por alguna persona en “algún edificio alto”. Un suceso sin consecuencias que ha quedado como una «falsa alarma» al no haber tenido consecuencias para los majariegos.

Majadahonda Magazin