Tina de Luis ha escrito numerosos cuentos, algunos de los cuales han sido publicados para el disfrute de niños, adolescentes y adultos

ELENA MARTICORENA. En la cuarta y última entrega de la entrevista concedida por Tina de Luis a MJD Magazin, la escritora de Las Rozas que fue profesora en Majadahonda confiesa que la llegada de las plataformas multimedia y toda esa nueva tecnología, aunque imprescindible en estos tiempos, necesita y ocupa un tiempo, «incluso me atrevo a decir que genera una fuerte atracción que puede derivar en dependencia si no se controla su uso. El tiempo que se le dedica se resta a los espacios temporales de la lectura. Debemos encontrar el modo de conseguir que no la absorba por completo, lo cual no es un empeño sencillo. Por supuesto, hay que encontrar el modo de lograr una buena convivencia entre ellos, para que tecnología y lectura no vayan la una en detrimento de la otra«, aclara. 


Elena Marticorena

¿Cómo ha evolucionado el amor por la literatura en las últimas décadas? –En mi opinión, la evolución ha sido muy positiva, aunque hoy en día, si bien se ve beneficiada por el alcance de difusión que tienen los medios de comunicación en la sociedad, que la hacen llegar hasta el último rincón. Y aunque es más asequible en términos generales, tiene que competir con poderosos contrincantes, como las redes sociales, los cientos de canales y plataformas televisivas, los juegos virtuales…, con todo tipo de distracciones.  En el momento actual, la literatura no solo hay que imaginársela en papel, son muchas las vías por las que llega al público: blogs, páginas web, prensa digital… En contrapartida, hay que reconocer que debido al bombardeo de información de todo tipo, tendemos a la economía del tiempo, cansan los textos largos y costosos de leer.

Maestra y amante de la literatura. ¿Cuándo decidiste publicar tu primera obra y con qué propósito?Siempre me ha encantado escribir desde muy pequeña. Hasta determinada edad iba acabando y acumulando cuentos y poemas en mis cuadernos o libretas. De mayor, llegan los estudios universitarios, el trabajo y los hijos, todos muy necesitados de atención, y aparcas parcialmente tus deseos.  Aun así, yo seguía escribiendo algo, en los momentos en que me lo podía permitir, con sacrificio y esfuerzo, por supuesto. Daba por hecho que lo de publicar en mis condiciones venía a ser una utopía. Un día, me informaron que una editorial iniciaba una línea de libros infantiles y juveniles. No existió propósito ni premeditación por mi parte: la suerte, la casualidad o el destino llamaron a mi puerta. No lo pensé dos veces. Presenté mis dos primeras novelas juveniles y me publicaron ambas. Fue sublime, un sueño hecho realidad. Seguí escribiendo otras obras, pero espaciadas. Ahora, que las circunstancias han cambiado y el tiempo me es más favorable, puedo entregarme en cuerpo y alma a la escritura.


«Elda y los cinco mundos» y «En la piel del corazón» son dos de las novelas infantiles/juveniles de Tina de Luis

Has publicado numerosas obras, ¿podrías establecer algún hilo en común entre todas ellas? Entre las 7 primeras sí, son infantiles y juveniles. No cabe duda de que me condicionó mi papel de maestra, con las posibilidades que me ofrecía el hecho de conocer mejor el alma infantil. También las une el propósito de reflejar e incluir valores, tan necesarios en la sociedad en que vivimos. Esto no significa, en absoluto, que sigan una línea moralizante o instructiva, ni que resulten menos amenas… Son argumentos entrañables, entretenidos y con mayor o menor intriga. El mensaje se capta a través de los hechos y vivencias, y no con tediosas explicaciones. En tres de ellas, los auténticos protagonistas son libros. Posteriormente fui probando otros estilos y géneros de escritura: una novela juvenil y de adultos, una recopilación de relatos y dos novelas más. ¿Tienes algún nuevo proyecto en mente? Lo tengo y más de uno. En este momento, revolotean en mi mente 3 novelas, deseando salir a la luz. Una de ellas juvenil/adultos de fantasía, lo que se denomina ahora crossover, es decir, para todos los públicos. Lo que escasea es el tiempo, pero lo iré sacando como sea, porque el deseo de escribir da poca tregua.

Majadahonda Magazin