Alfredo Santaelena aplaude al Rayo Majadahonda (abajo). El equipo devuelve los aplausos a la afición (arriba)

J. FEDERICO MTNEZ. El Rayo Majadahonda logró este domingo 9 de octubre ante 2.200 espectadores (el mayor aforo de la temporada) un valioso y justo empate (0-0) ante un Deportivo de la Coruña en horas bajas que aunque solo suma 1 punto que de poco le sirve en la clasificación, sí al menos deja una sensación de cambio en el equipo con la nueva mano de Santaelena. Don Alfredo apenas tocó el plantel titular de jornadas anteriores –de hecho prácticamente todos los futbolistas habían jugado con el anterior entrenador dados los continuos cambios– pero sí que se notó un conjunto más compacto, una entrega más decidida y unas disputas de balón más aguerridas. Las fallas estructurales del equipo, sin embargo, siguen siendo las mismas: el centro del campo no es capaz de construir un juego de ataque desde abajo y a la delantera solo le llegan «pepinos» en lugar de balones. Sin embargo, en esta ocasión y frente al Depor, gracias a esta «cura de humildad» que significaba renunciar a ese juego constructivo frente a un equipo superior y limitarse a buscar el área en jugadas a balón parado y tímidos ataques por las bandas, a punto estuvo de dar una «campanada» porque tuvo una oportunidad de marcar en disparo cruzado. Y gracias también a tres extraordinarias paradas de última hora de Lucho, el Rayo Majadahonda mantuvo un empate que sabe a gloria frente a los 1.300 aficionados coruñeses. Sin embargo, la afición majariega (900 seguidores) se dejó sentir y en ocasiones sus gargantas superaron a las gallegas, por lo que se vio un bello espectáculo futbolístico también en la grada.


J. Federico Mtnez en la grada del Cerro

El Depor de la temporada pasada había logrado los 3 puntos en el Cerro del Espino (1-2) pero esta vez se vieron las fuerzas más igualadas, lo que quiere decir algo. Como balance final, la impresión de los aficionados rayistas fue buena: el equipo ha recuperado su espíritu de lucha frente a un grande de la categoría y se le vio mucho más ordenado. En ningún momento abandonó defensivamente la columna vertebral y el interior del campo y eso le dio el punto. Y aunque fallaron los centros desde las bandas –sobre todo en la derecha- y el ataque fue romo por inanición, sí que los jugadores dejaron la estela de que pueden salvar la categoría. La exigencia pasa ahora a Talavera el sábado 15 de octubre a las 7 de la tarde y donde el equipo majariego acude con el vitola de favorito, algo que en este partido le correspondía al Depor. Rayo Majadahonda: Lucho (3); Aldalur (1), Félix Ofoli (2), Casado (2), Pinillos (2); Mario (1), Néstor Albiach (2), Salama (2); Alayeto (2), David Rodríguez (1), Nando (1). Segunda parte: Konaté (1), Solomon (1), Guille Donoso (1), Sergio Llamas (1).

Majadahonda Magazin