ELENA MARTICORENA. El proyecto creado y dirigido por Eduardo del Rio Etchart, madrileño residente en El Escorial que en el año 2006 decidió abrir en Majadahonda un espacio de educación y adiestramiento canino, se llama Paramascotas. Eduardo es técnico en gestión del comportamiento desde hace 20 años y educador canino profesional. Además, en Paramascotas, la formación nunca duerme, ya que tanto él como Ana (la otra integrante del proyecto), están en continuo aprendizaje. Esta escuela nace con la intención de «dar a la gente algo diferente a lo que había y hay en el mundo del perro: una alimentación más natural, una nueva forma de educar a nuestros peludos, de entenderles, Y de ayudarles. Todo basado en la calidad de nuestros productos» explica Eduardo del Rio. Su local se encuentra situado en la calle San Andrés 3, Local F de Majadahonda, en pleno centro del municipio. Ofrecen diferentes servicios como la educación canina, el adiestramiento básico, la tutela de cachorros, la gestión del comportamiento y la gestión de adopciones. También realizan servicios de peluquería tanto canina como felina, y tienen habilitado un Canal en la plataforma de Youtube donde los tutores pueden encontrar videos de diferentes temáticas. Majadahonda Magazin ofrece esta entrevista para todos aquellos que tienen o piensan tener una mascota en sus casas, y necesitan un asesoramiento general sobre todo lo que conlleva convivir con un «peludo».
¿Qué es la educación canina? –Nosotros siempre diferenciamos entre educación y adiestramiento. Un perro necesariamente debería tener educación, pero no así adiestramiento. Educar a un perro es hacerle competente y autónomo. Es ayudarle a desarrollar las capacidades necesarias para convivir con nosotros, gestionar el entorno en el que vive y todas las situaciones a las que pueda enfrentarse en el día a día. La educación canina es la pieza fundamental para lograr una convivencia sana y un perro feliz. ¿Por qué es importante el adiestramiento? –Lo más importante no es que nuestro perro esté adiestrado, sino que esté educado. Que mi perro sea capaz de gestionar su día a día, que sea sociable, que sea autónomo… Sí es cierto que podemos necesitar del adiestramiento para ayudar a nuestro perro en determinadas situaciones, como aquellas que puedan suponer un peligro.
¿Cómo trabajáis? –Nuestro trabajo en Paramascotas se basa en tres pilares básicos: vínculo, comunicación y emoción. El vínculo, esa relación estrecha entre tutor y peludo es fundamental en nuestro trabajo. Nos habla de confianza y seguridad. Y, para ello, también necesitamos de una buena comunicación, tanto para saber comunicar a nuestro perro lo que realmente queremos trasmitirle como para entender lo que nuestro perro nos está diciendo. Y como fondo de todo, la emoción. Porque nuestro perro no siente lo mismo en cada momento, y debemos tenerlo en cuenta también en su día a día. Nuestro trabajo es totalmente personalizado, para cada tutor y para cada peludo. Ni todos los perros son iguales ni todos los tutores son iguales, de manera que es muy difícil estandarizar un protocolo. Cada uno tiene unas circunstancias distintas y en consecuencia un trato diferente. Trabajamos siempre en la casa del perro o en su área de influencia, en presencia del tutor.