Alfredo Santaelena saca a Jeisson: esta vez los cambios no surtieron todo el efecto deseado aunque el equipo hizo un gran partido colectivo en cuanto a juego

J. FEDERICO MTNEZ. La experiencia del entrenador del Rayo Majadahonda, Alfredo Santaelena, enjuició así el encuentro disputado frente al Linares Deportivo este domingo 30 de octubre (2022): «los futbolistas tienen que saber que jugando así de 10 partidos vas a perder 2 pero los otros 8 los vas a ganar o empatar. El equipo puede dar más y espero que sigan creciendo como futbolistas individual y colectivamente. Voy a centrarme en la Cultural Leonesa y en las cosas que hemos hecho bien, que han sido muchas. Esta categoría es tan exigente que esos pequeños fallos y errores te castigan y penalizan mucho, me fastidia más que nos hagan un segundo gol como ha sido, en una jugada en un corner donde el jugador sale vivo, tenemos que aprender a competir. Estoy jodido porque al final hemos perdido 3 puntos pero estoy contento con la imagen positiva del equipo, este es el camino a seguir».


J. Federico Martínez con paraguas en el Rayo Majadahonda-Linares

Pero si Santaelena es quien ha resucitado el fútbol del Rayo Majadahonda, normalmente se pide a Santa Bárbara que deje de llover cuando truena y a Santa Clara para que escampe, mientras que a San Isidro se le ruega para todo lo contrario: que llueva y llueva, todo ello amparado por la Virgen de la Cueva, que al parecer se ubica en Asturias, a orillas del río Mon o de La Marea, en la salida de Infiesto. Esta vez no llovió intensamente en el Cerro del Espino como en el partido contra el Fuenlabrada aunque en el segundo tiempo hubo que sacar los paraguas por algunas lloviznas intermitentes que hacían incómoda la visión del espectáculo deportivo. Y lo cierto es que cada vez que caían del cielo esas gotas, se oían comentarios entre el público acordándose del alcalde y los concejales de su Equipo de Gobierno, y no precisamente para bien. Aún queda por venir lo más crudo del largo invierno y si la parroquia majariega se sigue mojando no hay que ser adivino para vaticinar que los ánimos se irán encrespando aún más. Y esa sensación colectiva, en un año de elecciones municipales (faltan solo 7 meses para ir a las urnas) se convierte en materia altamente inflamable y peligrosa.

Majadahonda Magazin