Rubiales amenazó con represalias económicas y deportivas a los clubes que ejercieran su derecho a asociarse y dio 48 horas para disolverse. Finalmente no ha podido cumplir sus intimidaciones dada su inconstitucionalidad

J. FEDERICO MTNEZ. Ha pasado una semana, Luis Rubiales, presidente de la RFEF, y su secretario Andreu Camps, no han tomado las represalias anunciadas contra los clubes de Primera RFEF que ejercieron el derecho a asociarse que recoge la Constitución. Y a pesar de los numerosos improperios e insultos que lanzaron contra ellos («mercenarios, satélites, peones, mentirosos»), y de la amenaza de que tenían un plazo de 48 horas para disolverse si no querían ser expulsados de la competición, numerosos medios de comunicación siguen haciéndose eco de la noticia de MJD Magazin que desvelaba los pormenores de la reunión de los clubes de Primera RFEF en la sede de la Federación española en Las Rozas bajo la presidencia de Rubiales. Al diario ABC se le ha sumado la cuenta «@GradaBpro» de Twitter y la web «5maseldescuento« de Albacete, registrando comentarios desde Logroño, Santander, Salamanca, Linares, etc…


Las violaciones al artículo 22 de la Constitución por parte de un cargo público (Rubiales es presidente de la RFEF) pueden constituir un delito penal y acarrear la inhabilitación, según expertos constitucionalistas consultados

«Vamos conociendo más detalles de la reunión, sin presencia de las cámaras, que se produjo el jueves 10 de marzo (2022) en Las Rozas con todos los equipos participantes en la Primera RFEF. En ella, en la que asistió Jorge Buergo en representación del Albacete, se explicó por parte de la RFEF todas las novedades que había surgido tras la salida de Footters como plataforma para seguir los encuentros de la categoría, así como se evaluó la situación de crisis provocada por algunos clubes rebeldes que han formado una asociación para conseguir mejoras económicas que haga más viable la participación de estos clubes en la categoría de bronce del fútbol español. Según recoge Majadahonda Magazin en su medio digital, el director general del Albacete manifestó su malestar por el hecho que ahora no haya que pagar para poder visionar los enfrentamientos de la división y que esto pueda frenar la llegada de público al estadio en la recta final del campeonato. En cualquier caso fue algo que no pasó factura el pasado domingo frente al Atlético Baleares, donde pudimos presenciar una gran entrada en el Carlos Belmonte y fueron más de 6500 espectadores los que presenciaron la victoria de su equipo en duelo en la zona alta de la clasificación», señala esta web.


Stephen Newman (Dux Inter de Villaviciosa de Odón)

Además, los presidentes de los 6 clubes que se asociaron para obtener más ingresos y reducir gastos siguen dando entrevistas para explicar su proyecto. Stephen Newman, presidente del Dux Inter de Villaviciosa de Odón, ha declarado a «Europa Sur» que
“esta Primera RFEF estuvo dieciocho meses gestándose, casi desde que comenzó la pandemia. Y la Federación aumentó los gastos con respecto a la Segunda B, porque obliga a tener un médico en los entrenamientos, a pagar arbitrajes de 2.900 euros, a desplazamientos como el de la Balona hasta Andorra que cuestan más de 10.000 euros, a que todos los jugadores tengan un sueldo por encima del salario mínimo interprofesional, pagamos una multa de 2.100 euros cuando expulsan a un entrenador… pero a la Federación se le olvidó garantizar los ingresos y eso es lo que nosotros buscamos”. En la entrevista, Stephen Newman añade: «La Federación quiere controlar los ingresos porque Rubiales se lleva un porcentaje de los contratos» y sostiene que la Federación Española no podrá tomar medidas contra los seis clubes de la Asociación: «La UEFA lo que prohíbe es unirse para formar una competición paralela y ésa no fue nunca nuestra intención. Olvídense de represalias a través de los árbitros, hay que creer en el sistema. ¿Félix Sancho? En Venezuela también hay gente a la que da miedo criticar el chavismo», concluye la noticia.

Jesús Medina, presidente del Linares

Por último, el diario ABC señala que «la nueva competición ha supuesto un incremento aproximado de un 50% sobre los presupuestos que manejaban los clubes en el modelo de competición de Segunda B, como consecuencia de los nuevos requisitos que se exigen para permanecer en Primera RFEF, que tienen incidencia directa en la aplicación del gasto (avales, iluminación, salarios, césped, ampliación de aforo, etcétera), con unos ingresos que no han cumplido con las expectativas que inicialmente se barajaban». Y le pregunta a Jesús Medina, presidente del Linares, sobre los fines con los que nace la asociación que rechaza la RFEF: ¿Es verdad que la mayoría de los clubes de la categoría apuntan a acabar la temporada con importantes pérdidas?: «No tenemos datos concretos de todos los clubes, pero podemos estimar que aquellos que no obtengan suficiencia financiera por el peso de su masa social, deberán afrontar importantes pérdidas en sus presupuestos, que tendrán que sufragarse con endeudamiento o petición de esfuerzos económicos a sus socios o accionistas».

Luis Rubiales y su secretario Andreu no han podido consumar sus amenazas porque se dieron cuenta de que infringirían la Constitución

Los fines de la Asociación de Clubes de Fútbol de la Tercera Categoría Nacional: 1) La representación, defensa y asesoramiento de todos sus miembros y de los intereses de la Asociación ante toda clase de personas y entidades, públicas y privadas, nacionales o extranjeras, y, especialmente, ante los organismos deportivos, tales como el Consejo Superior de Deportes y la Real Federación Española de Fútbol. 2) El impulso, desarrollo, organización y fomento de todo tipo de actividades relacionadas con el fútbol en general, y, en particular, con el fútbol de Primera División RFEF, que contribuyan a su mejora y progreso. 3) La obtención de recursos de todo tipo, para sí y sus miembros, a través de la actividad propia de la Asociación. 4) Organizar todo tipo de certámenes, campeonatos y competiciones de carácter no oficial, eventos, acciones formativas, congresos, cursos, seminarios y cualquier otro tipo de actividad en beneficio del desarrollo de la Asociación y de sus miembros. 5) Participar en la negociación colectiva, plantear conflictos colectivos de trabajo y promover el diálogo social y la participación institucional en los organismos de las administraciones públicas. 6) La explotación comercial y publicitaria, o de cualquier otro tipo, de la propia Asociación o de las actividades deportivas que organice, en su más amplio sentido, incluyendo los contenidos audiovisuales que, en su caso, pudieran comercializarse. 7) A petición de los miembros de la Asociación, resolver los conflictos que pudieran surgir entre ellos, mediante procedimientos de mediación o arbitraje. 8) La promoción y el fomento del deporte. 9) Cualesquiera otras actividades que redunden en beneficio de la Asociación o sus asociados.

 

Majadahonda Magazin